En el momento menos pensado se le cayó la ‘vuelta’ a Jonathan Omar Toala Giler, quien fue detenido por la Policía tras morder el anzuelo que le pusieron los gendarmes para arrestarlo. El sospechoso estaba en la mira de los agentes de la Unidad Antisecuestros de la Policía (Unase) después de que el 15 de septiembre de 2021, contactara a su víctima en la parroquia San Juan del cantón Puebloviejo para exigirle $70.000, a cambio de no atentar contra su vida ni la de su familia.

La casa de la víctima escogida para este tipo de delitos incluso fue baleada en los días previos a la detención de Toala Giler, cuando la extorsionada no respondía a sus demandas.  Después del atentado continuaron las exigencias extorsivas y el perjudicado aceptó pagar el dinero. Pero antes decidió poner su caso en manos de la Policía.

El jefe de la Subzona Los Ríos N12, coronel William Martínez, detalló que en las amenazas vía telefónica, el extorsionador se habría identificado como miembro de una organización delictiva liderada por alias ‘Oliver’, quien actualmente se encuentra detenido, luego de la desarticulación de la agrupación AK47. 

“Hicimos que la víctima citara al sospechoso en el parqueadero del centro comercial y una vez entregado el dinero procedimos con la captura. Posteriormente verificamos que el ciudadano no pertenece a la organización delictiva de la cual se tomó el nombre para extorsionar a su víctima”, detalló el comandante.

El oficial añadió que el sospechoso, oriundo de Manabí, contactaba a personas en los cantones Babahoyo, Vinces y Quevedo. De ahí que se investiga, si este mismo ciudadano está involucrado en los casos de extorsión registrados en Babahoyo.

Luego de la aprehensión el sospechoso fue puesto a órdenes de las autoridades y en la audiencia de flagrancia, se dictaminó prisión preventiva y 30 días de instrucción fiscal por el delito de extorsión. Entre las evidencias del caso constan un teléfono celular, un sobre amarillo con el dinero de la supuesta entrega.