Cinco disparos distribuidos en la cabeza, tórax y extremidades superiores terminaron con la vida del colombiano Harold Benavides, de 46 años. La víctima se movilizaba en su motocicleta por el casco comercial del cantón Caluma, en la provincia de Bolívar.

El extranjero fue asesinado la tarde del viernes, en presencia de comerciantes y transeúntes, quienes realizaban sus actividades rutinarias en dicha zona de esa localidad.

El crimen al estilo sicariato estremeció a los pobladores, debido a lo inusual del hecho, que incluso se extendió hasta horas de la noche por la tardanza en el levantamiento del cadáver. La policía acordonó el área y en medio del alboroto que originó el crimen llegaron los familiares del fallecido.

Era prestamista

“Oye, vente a Caluma que ‘viraron’ a Harold”, se escuchó de uno de los compañeros del difunto mientras hablaba por teléfono. Los gendarmes confirmaron que Benavides era prestamista y realizaba labores de cobranza en varios cantones de las provincias de Los Ríos y Bolívar.

Sin embargo, los deudos no dieron más detalles de la actividad y prefirieron esperar el procedimiento para trasladar el cuerpo hasta la morgue de Babahoyo (Los Ríos). Benavides vivía con su esposa en la capital riosense y hasta el momento se desconocen los motivos del ataque a mano armada.

No obstante, los investigadores manejan la hipótesis de que el suceso podría estar relacionado con la actividad que desempeñaba. El hombre tenía cuatro años radicado en Ecuador y ayer sus familiares efectuaban los trámites para trasladar el cuerpo a Colombia y brindarle cristiana sepultura.