La madre de la adolescente que fue brutalmente agredida en las cercanías de un colegio en el parque Itchimbía, en el centro de Quito, no soporta ver los videos que se hicieron virales en internet y que muestran el hecho.

Siente rabia e indignación de no haber podido defender a su hija. La agresión ocurrió el viernes 20 de junio y, desde entonces, la menor de edad tiene dolores de cabeza. Además, quedó con tres moretones en el cráneo y raspones en el rostro, brazos y piernas.

La señora explicó que el lunes 23 de junio acompañó a su hija al colegio para que rindiera unos exámenes, pero la estudiante comenzó a tener mareos y la llevó de regreso a su casa.

Esa misma tarde colocó la denuncia por intimidación en la Fiscalía y espera un escrito para que su hija sea atendida en un hospital y se pueda determinar, mediante un examen médico, los daños que le provocaron en su cuerpo.

¿Qué pasó con la presunta agresora?

Por su parte, la mamá de la alumna señalada como presunta agresora fue a la Fiscalía el 25 de junio para también poner una denuncia por el delito de intimidación, luego de que empezara a recibir mensajes y llamadas amenazantes tras el hecho que quedó registrado en video y que, para entonces, fue compartido entre los padres de familia del plantel educativo.

En la denuncia, la señora explica que la chica agredida supuestamente acosaba a su hija desde el primer mes del año lectivo 2024-2025.

Según le habría comentado su hija, la agredida, al parecer, le ponía apodos, la insultaba utilizando adjetivos racistas y, al parecer, se inventaba chismes que difundía entre sus otros compañeros. Uno de ellos era que estaba embarazada.

Tal habría sido la gravedad del acoso que su hija presuntamente se fugó del colegio durante al menos 15 días, pues no quería regresar a clases, para supuestamente para evitar las burlas.

Una docente se habría percatado de su ausencia y presuntamente alertó a su madre. En ese entonces hubo una reunión con las implicadas y algunas autoridades del plantel, pero las agresiones habrían seguido.

¿Qué ha hecho la Policía?

El teniente coronel Rolando Beltrán, subcomandante del distrito Manuela Sáenz, manifestó que han reforzado la seguridad en las afueras de este plantel, para evitar algún incidente como el que se presentó la semana pasada.

El oficial aclaró que estas medidas también deben ser solicitadas por las autoridades de la unidad educativa, pero asegura que no han tenido ningún tipo de acercamiento. “Estamos prestos para ayudar en cualquier tipo de formación a los estudiantes”.

Además, desde la Policía se plantea ubicar a este colegio como uno de los prioritarios para entrar en el plan Escuela Segura, en el que se brinda mayor apoyo a los establecimientos donde existe contextos de violencia social y presencia de otro tipo de delitos.

Fiscal analiza el caso

El fiscal César Peña Morán analizó el caso y comentó que este no se encuadraría en una simple riña escolar. Para él, lo ocurrido podría constituir un grave delito penal: tentativa de asesinato.

Según Peña, la persistencia de la agresión, incluso cuando la víctima estaba sin capacidad de defensa, revela una posible intención de causarle la muerte. En caso de que se confirme un delito y haya un proceso judicial, el profesional en derecho señala que la sanción máxima sería de hasta ocho años por tratarse de una menor de edad.

Caso de violencia en colegio de Quito

El 20 de febrero de 2024 un estudiante del tercero de bachillerato de este mismo colegio, apuñaló a uno de sus compañeros, porque supuestamente no le permitió utilizar una cancha de vóley durante el receso.

Este caso conmocionó a la comunidad educativa y , desde entonces, los padres de familia se organizaron para formar brigadas de seguridad y revisar las pertenencias de los estudiantes, por si alguno de ellos lleva algún objeto prohibido. La medida duró un par de semanas y después dejaron de vigilar a los alumnos.

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