La última vez que los familiares de Hernán Fabricio Mendoza Velásquez lo vieron fue el viernes 26 de enero de 2024. El joven ingeniero en Telecomunicaciones, quien tiene 30 años, salió desde su casa ubicada en el sector La Kennedy, del norte de Quito, para encontrarse con un amigo y asistir a un evento en la Pradera, también en el norte capitalino.

El amigo de Hernán fue encontrado al día siguiente, no en buen estado, y él reveló que al parecer les dieron algún tipo de sustancia para que perdieran el conocimiento y su voluntad, probablemente escopolamina o algo similar. El conocido fue hallado en el puente de Guápulo y es por ese motivo que las búsquedas se han concentrado en la zona y alrededores, incluso en las quebradas.

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Sin embargo, hasta la mañana de este domingo 11 de febrero de 2024 se desconocía el paradero de la víctima, pero la noche anterior, el sábado 10 de febrero, hubo un avance en el caso, pues fue procesado Franklin Álvarez, quien sería el taxista que esa noche los movilizó. Se investiga si él trabajó con otras personas para que luego se subieran en el automotor y atentaran en contra de la integridad de los jóvenes.

El sospechoso ha sido procesado por la infracción tipificada en el artículo 163.1, inciso 2, numeral 1, del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que trata el delito de desaparición involuntaria, con las siguientes características:

En esta causa, por tratarse de un proceso abierto fuera del tiempo de flagrancia, se ha determinado en la audiencia que la Fiscalía tendrá 90 días para recabar todos los elementos que permitan llevar a juicio al sospechoso. El mismo lapso tiene la defensa para buscar sus descargos. Este tiempo se puede extender a 120 días si durante el avance del caso, dentro del plazo establecido, se vincula a alguien más.

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