Las autoridades colombianas dieron un balance de lo que fueron las actividades militares y policiales, en ese país, para combatir el narcotráfico y sus derivaciones. Esto durante ocho años de intervenciones en cuanto a cultivos y decomisos de drogas.

Según el Ministerio de Defensa de Colombia, en todo ese lapso se destruyeron 25.000 laboratorios para la elaboración del alcaloide, mientras que los estupefacientes incautados alcanzaron las 2.000 toneladas.

“Entre 2010 y 2018 se capturaron 27.601 integrantes de los Grupos Armados Organizados y Grupos Delincuenciales Organizados”, señalan los líderes militares y políticos. En este mismo periodo fueron abatidos 389 miembros de estos grupos.

Pero, a pesar de las aparentes cifras alentadoras, las autoridades de Estados Unidos dieron otro balance en el que se muestra un aumento en la actividad ‘narco’ en el vecino país cafetero.

El gobierno estadounidense señaló que en 2017 hubo un aumento de los cultivos ilícitos. Esto fue de un 11%, es decir, que en territorio colombiano hay más de 200.000 hectáreas con plantas que sirven para la elaboración de estupefacientes.

“La producción potencial de cocaína pura también aumentó el 19 %, desde las 772 toneladas métricas en 2016 hasta las 921 toneladas métricas en 2017”, precisó la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca.

Incluso, Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, amenazó al país cafetero de retirarle apoyo en la lucha antidrogas por no cumplir con los parámetros para su erradicación.

Todo esto se da en zonas fronterizas, tanto de Ecuador como de Venezuela. Es por eso, que el territorio ecuatoriano es visto como sitio de paso para alcaloides, aunque expertos nacionales hablan de que en el país se producen sustancias ilícitas.