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¡‘Desaparecidas’ estaban escondidas con unos jóvenes!
Las dos adolescentes venezolanas a las cuales se las buscó durante más de dos semanas estaban en una vivienda de Santo Domingo de los Tsáchilas.

La denuncia de su desaparición fue asentada a las 23:16 del 17 de abril. Dos semanas más tarde, fueron ubicadas.
Un mensaje en redes sociales delató la ubicación de dos adolescentes venezolanas, desaparecidas el 17 de abril pasado. La última vez, que la madre de María la vio fue aquella fecha. La muchacha visitó a su progenitora en el sitio en el que labora y le pidió dinero para comprar una salchipapa.
Desde ese día nada se supo de López ni de su amiga Sulmery hasta el lunes pasado, cuando los agentes de la Policía lograron ubicar a las dos chicas en una vivienda de Santo Domingo de los Tsáchilas.
Según Julio Gordón, de la Dinapen (Policía especializada en niños y adolescentes), el caso se trató de una desaparición voluntaria. Sin embargo, al haber una denuncia en Fiscalía, los agentes cumplieron con devolver a las menores de edad a sus hogares.
Pero antes, –durante más de dos semanas– la búsqueda fue minuciosa, señaló el oficial. Desde que se asentó la desaparición de las chicas, se emitió una alerta amarilla con la que la Policía de Perú y Colombia estarían pendientes por si las jóvenes decidían cruzar la frontera.
Días atrás, una de las muchachas se contactó con su madre por la plataforma digital para decirle que se encontraba bien. Utilizando el IP (número de identificación) de la computadora de la que fue emitido ese texto, los uniformados las hallaron en una vivienda del barrio Río Verde, de la tierra colorada.
Estaban acompañadas de unos jóvenes, de origen colombiano. Según Gordón, uno de los cuales sería novio de una de las chicas.
Luego del procedimiento inició el retornó a la capital, pero antes de que las adolescentes regresaran con sus familiares se les realizó un examen médico legal que determinó que no había novedades.
Con un acta de responsabilidad de sus madres, las chicas regresaron a sus hogares en San Antonio de Pichincha y Pomasqui, norte de Quito.