Cinco sujetos de alta peligrosidad, según la Policía, fueron detenidos en el interior de un domicilio ubicado en el Comité del Pueblo, en el norte de la capital.

Ellos estarían inmersos en delitos como tráfico de droga, robo a personas y extorsión a los locales del sector. El coronel, Jaime Ruales, comandante de Quito, señaló que cuando las víctimas no pagaban las ‘vacunas’, los sospechosos los amedrentaban con explosivos.

Además, los detenidos serían los responsables de atracar a las personas que esperaban en las tres paradas de buses que bordean este barrio popular de la ciudad.

Dos de los sospechosos son venezolanos, uno colombiano y dos ecuatorianos. En los cuartos en los que dormían, los agentes encontraron dos escopetas, dos tacos de dinamita y municiones de pistolas y fusiles. También incautaron una motocicleta que supuestamente la utilizaban para cometer los delitos.

Los sujetos fueron llevados a la Unidad de Flagrancia para procesarlos por el delito de tenencia y porte de armas.

Una historia de nunca acabar

El teniente coronel Pablo Luna, jefe de operaciones de la Policía Judicial, señaló que se investiga si los detenidos serían de algún Grupo de Delincuencia Organizada (GDO).

Sin embargo, durante la presentación de los sospechosos a los medios de comunicación, uno de estos se dio la vuelta e hizo la señal de Los Lobos con su mano izquierda. Pese a su captura, los moradores del Comité del Pueblo no creen que disminuirán los delitos en el sector.

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El inmueble en el que hicieron la intervención policial ha sido llamado como ‘la casa de los venezolanos’ u ‘hotel del crimen’ porque la mayoría de los huéspedes son extranjeros que se dedicarían a robar y vender droga.

Uno de los dirigentes barriales señaló a EXTRA que semanas después de que se realiza un operativo policial, los criminales vuelven a ‘brotar’ den dicha propiedad. “Parece una sucursal de los delincuentes”.

El 22 de enero de 2025 se hizo una intervención con más de 60 policías de diferentes unidades en el ‘hotel del crimen’ y detuvieron a 13 personas, uno de ellos era el hijo de La Pastora, una mujer conocida en el sector por la venta de ‘merca’.

El pedido de los vecinos del Comité del Pueblo

Los dirigentes del sector han intentado hablar con la propietaria del inmueble, pero al parecer, ella no vive en el país y una persona extranjera administra la casa. También han tenido acercamientos con autoridades municipales y gubernamentales para ‘limpiar’ esa casa de la criminalidad, pero aseguran que no les hacen caso.

Los habitantes se han acostumbrado a los robos y peleas dentro y fuera de ese domicilio. Sujetos con cuchillos queriendo hacerse daño, consumo de droga y el ingreso de cosas robadas ha sido el ‘pan de cada día’ en este sector.

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