Se lo conoce como servicio, ‘water’, ‘trono’, ‘ñoba’, escusado. Otros, como Álex Jiménez, le dan un nombre más personalizado. “Con la gente del trabajo le decimos ‘cabina’ y antes de ingresar nos preguntamos: ¿Vas a hacer llamada... larga o corta?”, se carcajea el cincuentón.

Es que aunque suene a chiste, esta indispensable pieza del baño tiene su fecha conmemorativa y es el 19 de noviembre, el Día Mundial del Retrete.

Otros usos

Al ‘ñoba’ no solo acuden quienes van a hacer sus necesidades biológicas. El manabita Paúl Tapia afirma que él se ha ido de ‘juego de trono’. Y no se refiere a la popular serie de HBO, sino a que ha ‘jugueteado’ con su pareja. Sí, allí se han ido de ‘cuerpeo’.

También sentado en su 'trono' se ‘pega’ uno que otro tabaco, se pone a leer el periódico o revisa su celular. Y cuando ‘empina el codo’ en exceso, vuela a vomitar en él.

Karina Vera revela que en algunas ocasiones le ha servido como almohada (con la tapa abajo), cuando borracha se ha quedado ‘ruca’.

Por su parte, Lizz Silva, quiteña de 35 años, lo emplea como banquito, levanta su pie y se amarra el zapato, lo limpia o le da su lustrada.

¡Corre con un fósforo!

Juan Carlos Delgado reconoce que no entra al escusado sin su palito de fósforos, y no precisamente para fumar, sino que este es el ‘espantaolores’.

“¡Hay que pensar en el prójimo! Tengo que cuidar los pulmones del que luego va a entrar, sobre todo si es un baño que también lo usan las mujeres”, dice muerto de risa el guayaquileño de 30 años.

Para tomar decisiones

Angie Sotomayor (19 años) dice que las mejores ideas se le han ocurrido sobre el retrete. “Le dije a mi novio que estudiemos cómo pintar las uñas acrílicas para ponernos un negocio, la mejor (idea) que se me ha ocurrido. Este es un lugar para pensar”.

La manaba Ariana Zambrano (27) relata que en el escusado tomó una gran decisión para ella: endeudarse con una cocina. También considera que en este sitio una madre de familia puede obtener minutos de relax, pues allí sus hijos no la ‘joroban’.

Tremenda coincidencia

Y justo el 19 de noviembre también es el Día Internacional del Hombre.

“Nada que se alinearon los astros. De ley unificaron las fechas porque los machos somos los que más pasamos sentados en él, somos los reyes en eso”, expresa sonriente Delgado.

Fabricio Mera (20) coincide con él: “Somos los que más lo usamos, por eso quizá coinciden las fechas. Yo paso pegado a mi ‘silla’, después de cada comida voy para allá”.