Ahorros: ¿En el banco o en colchón?

Las dudas sobre el lugar más seguro para guardar tu dinero cruzan por la mente más de una vez, en especial en época de quincena y fin de mes.

Privarte de uno que otro gustito toma sentido cuando ves la alcancía llena, pero ¿dónde ponerlo?, algunos acuden al viejo y confiable colchón, o a su fiel compañero de finanzas ‘el chanchito’, pero la realidad es que dejarlo en el banco es la mejor opción.

Si te preguntas por qué, la respuesta es fácil. Al abrir una cuenta en un banco pasas a estar dentro de la inclusión financiera. Tal vez el término te suene raro, pero tiene gran importancia, incluso más de la que crees. Según el Banco Mundial (BM), esto se refiere al acceso que tienen las personas a una variedad de “productos y servicios financieros útiles y asequibles que satisfacen sus necesidades, como pagos y transferencias, ahorro, seguros y crédito”.

¿Qué quiere decir?

Una cuenta bancaria es muy útil, en especial para guardar dinero, enviar y recibir pagos; y sobre todo para conseguir financiamiento.

En pleno siglo XXI, pocos son los que admitirán seguir utilizando su alcancía para guardar su dinero; sin embargo los datos de Global Findex revelan que —para 2017— cerca de 1700 millones de adultos en el mundo no poseían una cuenta bancaria.

En Ecuador este índice también es importante, Global Findex indica que más de 5 millones de personas no poseen un cuenta bancaria.

Aunque puede sonar cliché, la inclusión financiera —que llega con la apertura de una cuenta— puede ayudar a organizar tus gastos, ahorrar y efectuar pagos. Si quieres emprender, una cuenta es más que necesario ya que tendrás mayor competitividad y crecimiento.

Actualmente según el BM, más de 200 millones de micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES), ya sean formales o informales, carecen de un financiamiento adecuado debido a la falta de una cuenta bancaria.

Una de las razónes que estas empresas apuntan para no tener una cuenta bancaria es que sus actuales negocios son informales.

Tenerla y no usarla

Esto también es hacer trampa. A nivel mundial, según la base de datos Global Findex, una quinta parte de las cuentas están inactivas, sin depósitos ni retiros en los últimos 12 meses.

China es un excelente ejemplo de cómo se puede pasar del acceso al uso de las cuentas: en la actualidad, más del 80 % de los adultos de China tiene una cuenta. El 85 % de los adultos que compra algo en línea también paga en línea.

También hay desigualdad de género

Aquí las mujeres son minoría. Según el artículo publicado por la BBC en noviembre de 2017, solamente el 48 % de mujeres en América Latina poseen una cuenta en el banco.

Según el medio de comunicación, el ignorar a la banca y preferir usar el efectivo ocurre en muchas personas —especialmente mujeres— que tienen “bajos ingresos y no cuentan con las alternativas para planificar su vida financiera”.

Las cifras del Banco Interamericano de Desarrollo, también por BBC, los cinco países con peor inclusión financiera de mujeres en la región son Nicaragua (14 %), Perú (22 %), Honduras (24 %), El Salvador (29 %) y Colombia (33 %).