El nerviosismo y la forma de caminar del menor de sus cinco hijos fueron las señales que identificó una madre para presentir que algo malo le ocurría a su muchacho.

A los pocos minutos, su corazonada se convirtió en la más amarga realidad. Cuando el adolescente salió de su domicilio, dos tipos en moto lo interceptaron y uno de ellos le descargó 17 disparos de arma de fuego. Doce ingresaron a su cuerpo y produjeron su muerte.

El crimen del adolescente, de 17 años ocurrió la noche del martes 8 de febrero en la manzana 1, de la ciudadela Ferroviaria, centro de Durán.

La progenitora contó a EXTRA que minutos antes del asesinato, notó que su hijo tenía un comportamiento extraño porque caminaba tocándose la cabeza. Sin embargo, luego de preguntarle qué le ocurría, ella salió al patio a tender la ropa. A los pocos minutos escuchó los disparos.

“Lo noté nervioso, caminaba de un lado a otro. Le dije: '¿Mijo, qué te pasa?' y cuando bajaba las escaleras le pregunté: '¿A dónde vas?' y me contestó: ‘Voy a comprar unas galletas en la tienda del frente’... Fue la última vez que lo vi con vida”, recordó con tristeza la madre del adolescente.

La mujer agregó que desde hace seis meses su hijo trabajaba en una ebanistería. Sin embargo, de acuerdo a información de la Policía, el chico estuvo internado en una clínica de rehabilitación y, presuntamente, era miembro de una banda delictiva del sector.

Cuatro crímenes en Guayaquil

En menos de seis horas, cuatro personas fueron asesinadas en el Puerto Principal. Roossevell Perlaza Vivero, de 22 años, en la norteña cooperativa Balerio Estacio; Iván Cordero Quintuña (56), en la cooperativa Flor del Norte; y Marcos Domingo Jubile Díaz (42), en Flor de Bastión, también en el noroeste.

En la cooperativa Carlos Guevara Moreno (sur) sucedió el asesinato de Jonathan Faggioni Vicuña, de 20 años.