Exclusivo
Actualidad

El Gobierno ecuatoriano notificó la terminación unilateral de los contratos con Progen para las plantas de Quevedo y El Salitral./cortesía

Ecuador rompe contratos con Progen: tensión por millonarios acuerdos anulados

Progen tiene diez días para responder a CELEC por la terminación del contrato a las centrales de El Salitral y Quevedo

Ecuador enfrenta una nueva controversia contractual en el sector energético, mientras se avecina la temporada de sequía. La terminación de los acuerdos con la empresa estadounidense Progen Industries LLC, encargada de instalar 150 megavatios en dos plantas térmicas estratégicas, podría afectar la meta oficial de sumar nueva capacidad al sistema eléctrico nacional antes de septiembre de 2025.

El Gobierno argumenta incumplimientos contractuales, mientras la empresa extranjera alega causas externas y retrasos administrativos. Esta disputa se desarrolla en un momento crítico para la planificación energética del país, que había contemplado a los proyectos de Quevedo y El Salitral como parte del plan emergente para garantizar el suministro durante la época seca.

Cancelación de contratos con Progen

La Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEC) notificó a Progen Industries LLC la terminación unilateral de sus contratos para la instalación de generadores en las plantas térmicas Quevedo (Los Ríos) y El Salitral (Guayas). La información fue confirmada el 9 de junio de 2025 por la vocera presidencial, Carolina Jaramillo, quien detalló que Progen tiene un plazo de 10 días para responder formalmente.

(Te puede interesar: A días de entrar en vigencia: así operará el nuevo gravamen a la actividad minera)

La notificación fue emitida el 29 de mayo para Quevedo y el 3 de junio para El Salitral, en ambos casos debido a los retrasos en la ejecución del contrato. Estos proyectos, firmados en agosto de 2024, debían entrar en operación en noviembre del mismo año y aportar 150 megavatios al Sistema Nacional Interconectado (SNI), pero no han logrado cumplir con las metas establecidas.

La terminación del contrato con Progen abre dudas sobre el futuro de las centrales El Salitral y Quevedo.cortesía

De acuerdo con datos oficiales, Progen debía instalar 20 generadores en Quevedo (50 MW) y 29 en El Salitral (100 MW). Hasta la fecha, 46 de las 49 unidades generadoras han llegado al país. No obstante, las centrales permanecen inactivas y presentan retrasos en aspectos críticos como la instalación de transformadores y componentes clave. En el caso de El Salitral, se espera aún el arribo de un transformador procedente de China.

La empresa estadounidense atribuye los retrasos a factores de fuerza mayor, incluyendo el huracán Milton en octubre de 2024, huelgas portuarias y demoras administrativas por parte de CELEC, especialmente en pagos y aprobaciones técnicas. Sin embargo, desde diciembre pasado la estatal impuso a Progen multas que ascienden a USD 900.000, alegando incumplimientos contractuales reiterados.

La respuesta de Progen y posibles repercusiones legales

Ante la terminación unilateral, Progen anunció que se encuentra preparando una respuesta formal y adelantó su intención de presentar una demanda de arbitraje internacional contra el Estado ecuatoriano. Según la empresa, sus equipos representan una tecnología especializada que solo ellos pueden operar y transferir a CELEC, lo que podría dificultar cualquier reemplazo inmediato.

Esta situación no es nueva, desde inicios de año, el vínculo entre CELEC y Progen se deterioró progresivamente por desacuerdos sobre los plazos y pagos. Progen sostiene que ha completado un volumen de obra superior al valor pagado y que CELEC ha incumplido en cancelar avances importantes de las obras civiles.

Riesgo para el plan energético de estiaje

La paralización de los proyectos de Quevedo y El Salitral se suma a otros problemas que enfrenta el Gobierno en su plan de contingencia para el estiaje 2025-2026. La cancelación de estos contratos compromete la incorporación de 150 MW adicionales al sistema nacional. A este panorama se añade la posible incompatibilidad de los generadores que deben instalarse en Esmeraldas III, a cargo de la firma uruguaya Austral Technical Management SAS, lo que también podría afectar otros 91 MW comprometidos.

En total, de los 979 megavatios que el Ejecutivo proyectaba incorporar antes del estiaje, al menos 241 MW estarían en riesgo. Esta situación obliga al Gobierno a considerar alternativas, como la ejecución de obras paralelas que puedan suplir la capacidad perdida, en un plazo limitado.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!