Organismos de socorro piden a la ciudadanía no acercarse a orillas de los ríos de Cuenca

La noche del martes 14 de marzo el río Yanuncay, al oeste de la ciudad, se desbordó al registrar un incremento de caudal cinco veces mayor a los normales. El fenómeno ha obligado a las autoridades a ejercer un mayor control en las orillas de los afluentes, para evitar que la población ponga en riesgo sus vidas acercándose a las riberas que se muestran altamente peligrosas por el socavamiento de las orillas.

Personal de la Guardia Ciudadana mantienen un control estricto en las riberas de los ríos para impedir que la gente se acerque a las riberas y así evitar desgracias personales. Los patrullajes son constante.

Guillermo Cobo, jefe de la Guardia Ciudadana, solicitó a la colectividad, principalmente a los pescadores artesanales, a cuidar sus vidas evitando pescar en los ríos que cruzan la ciudad. “Las crecientes son repentinas y peligrosas” sostuvo Cobo tras apelar a la conciencia de los artesanos para que no expongan sus vidas.

Iván Palacios, gerente de la Empresa Municipal de Agua Potable, refirió “este río, el Yanuncay, el que más preocupación genera por cuanto superó los 143 metros cúbicos por segundo (nornal entre 15 a 20 metros cúbicos) y se salió de su cauce en la parte alta de la ciudad la noche del martes”.

El desborde no causó problemas a zonas pobladas, anotó el funcionario, sin embargo, el peligro persiste ante los pronósticos del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), que las lluvias continuarán hasta mayo.

De su lado el río Tomebamba se muestra amenazante con un flujo de 39 metros cúbicos por segundo; igual el Tarqui con 48, mientras que el cuarto río que cruza Cuenca, el Machángara, registra 10 metros cúbicos por segundo, y es convierte al momento en el menos peligroso, anotó Palacios.

La parte baja de Cuenca, sector de Guangarcucho al este de la urbe y donde confluyen los cuatro ríos; Yanuncay, Tarqui, Machángara y Tomebamba, y forma el río Cuenca, hubo también desborde y anegaciones de sus riberas. El caudal fue de 302 metros cúbicos por segundo, muy superior a los 50 metros cúbicos considerados normales. Este miércoles 15 de marzo, el nivel del río Cuenca bajó a los 158 metros cúbicos por segundo.

Los niveles de los ríos están siendo monitoreados por el sistema de alerta temprana que el Consejo de Seguridad Ciudadana instaló en marzo del 2016 en ocho sectores vulnerables de la ciudad, cerca de las orillas de los afluentes, para evitar desgracias personales ante desbordamientos eventuales generados por los inviernos.

Rómulo Montalvo, director del Consejo de Seguridad Ciudadana, explicó que el sistema de alerta temprana, es una herramienta que permitirá a los organismos de socorro a actuar a tiempo y evitar desgracias personales.

Son cámaras de vídeo y megafonía IP que alertan a la ciudadana sobre crecimiento eventuales y peligrosos de los flujos de agua de los ríos; y, la vez permite el envío de socorristas y personal de seguridad a las zonas donde el fenómeno se presenta, para de manera directa resguardar la seguridad ciudadana, anotó Montalvo.