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La era de las filtraciones
Los políticos son los protagonistas y muchas veces, quienes se encargan de difundir la información ‘reservada’.
Entre 2017 y 2018, en Ecuador se sucedieron tres filtraciones y fueron las más mediáticas.
Si se consigue un audio o un documento que involucre a altas autoridades, lo siguiente es difundirlo. Esa parece ser la premisa que rige a las continuas filtraciones en Ecuador.
Entre 2017 y 2018 se sucedieron tres y fueron las más mediáticas: Odebrecht y el tío de Jorge Glas, Eduardo Mangas y sus verdades sobre el gobierno y la más reciente: la llamada telefónica entre José Serrano y Carlos Pólit.
Los audios, sin embargo, no son lo único que se filtra. Correos electrónicos intercambiados entre Alexis Mera, Rafael Correa y que incluirían a Gustavo Jalkh —presidente del Consejo de la Judicatura— también han puesto bajo revisión a la justicia y si hubo o no, tráfico de influencias.
Eduardo Mangas, el ex secretario de la Presidencia
José Conceição, representante de la constructora Odebrecht y Ricardo Rivera conversan sobre una posible negociación que inicia el ‘tío’ diciendo: “Necesito plata para la campaña de vidrio”. Aquel seudónimo de ‘vidrio’ se lo vincularon directamente a su sobrino, Jorge Glas. Tanto Rivera y el ex segundo mandatario fueron condenados a prisión por asociación ilícita.
Eduardo Mangas, el ex secretario de la Presidencia
Era una conversación privada —aparentemente con gobernadores— que mantenía Mangas y terminó siendo pública en la página web Focus, dirigida por Fernando Villavicencio.
Entre los temas a los que se refirió el exsecretario de la Presidencia estaban las últimas elecciones: “Perdimos la primera vuelta y perdimos la segunda vuelta también, eso no fue ganado”. El funcionario dijo que sus declaraciones fueron sacadas de contexto y el 11 de diciembre del 2017 renunció a su cargo.
Pólit, Serrano y Vaca: un excontralor, el asambleísta principal y el Fiscal General
El excontralor Carlos Pólit supuestamente habría tenido una conversación con José Serrano y su preocupación central era Carlos Baca Mancheno, como Fiscal General.
El mismo Baca Mancheno se encargó de divulgar el audio y aseguró que él no negocia con nadie y que tampoco tiene “rabo de paja”. Sin embargo, la trama es una cadena de acusaciones: Pólit lo acusa al actual fiscal de haber usado mal el presupuesto de la comisión 30S, que en ese tiempo lideraba.
¿Violación a la intimidad?
El Código Orgánico Penal (COIP) establece en su artículo 178 el delito sobre la violación a la intimidad. “La persona que, sin contar con el consentimiento o la autorización legal, acceda, intercepte, examine, retenga, grabe, reproduzca, difunda o publique datos personales, mensajes de datos, voz, audio y vídeo, objetos postales, información contenida en soportes informáticos, comunicaciones privadas o reservadas de otra persona por cualquier medio, será sancionada con pena privativa de libertad de uno a tres años. No son aplicables estas normas para la persona que divulgue grabaciones de audio y vídeo en las que interviene personalmente, ni cuando se trata de información pública de acuerdo con lo previsto en la ley”.