Los pescadores de los puertos de la provincia de Santa Elena resolvieron la mañana del lunes 1 de octubre unirse a una medida de hecho que este gremio artesanal planifica a nivel del todo el perfil costero ecuatoriano para los próximos días.

Entre las principales causas para el reclamo están la inseguridad en el mar, la invasión de barcos camaroneros e industriales dentro de las 8 millas náuticas, oposición a que las embarcaciones de hasta 24 metros de eslora sean declaradas artesanales y la defensa de la Subsecretaría de Pesca que podría desaparecer.

Aunque no dieron mayores detalles de la protesta, se estima que está podría consistir en el cierre de vías, paralización de sus embarcaciones en las caletas pesqueras y manifestaciones en las calles de Quito; también prefieren mantener la fecha en reserva para no ser sorprendidos por la Policía, como ocurrió el pasado 20 de agosto en Progreso.

“Los pescadores de la Península están más unidos que nunca para defender la causa, mañana nos reuniéremos en Manabí, las autoridades no dan solución a nuestros problemas y tenemos que protestar de esta manera, no tenemos otra alternativa”, expresó Gabriela Cruz, dirigente de la Federación Nacional de Pescadores Artesanales.

En Santa Rosa se asegura que en los nueve meses del año, los delincuentes en el mar han asaltado a 350 lanchas llevándose los motores fuera de borda e implementos de pesca, el perjuicio supera más de tres millones de dólares.

La cifra no coincide con los registros de la Capitanía del Puerto de Salinas en donde se presentan las denuncias, en el ente naval constan 119 robos en lo que va del año “las denuncias son por gusto porque no se recupera nada”, asegura el pescador el Efrén González.

En las estadísticas analizadas por los pescadores consta que al poner resistencia a los atracos en el mar 11 han sido los fallecidos, tres de estos eran nativos de Santa Rosa “ya no aguantamos más, ojalá que con la paralización seamos escuchados”, indicó el dirigente Silvano Chichanda.