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Amenazaban con “poner una bomba”
Ocho personas fueron detenidas luego de agredir a policías y a residentes de un conjunto habitacional, la madrugada de ayer. Los futbolistas de Independiente y Católica estuvieron en la audiencia de formulación de cargos.

Así quedó el parabrisas de uno de los vehículos de Mauricio Giraldo, residente del lugar.
Parecía una escena de película. Cuando supuestamente un futbolista cayó al piso rodeado de seis policías, bastó un par de segundos para que resurgiera con fuerza, lanzando golpes, contra quienes pretendían agarrarlo.
De repente, y como quien intenta enviar un centro al área rival, el jugador José ‘Tin’ Angulo (actualmente suspendido cuatro años por dar positivo a la cocaína en control antidopaje), presuntamente levantó una de sus piernas y de una patada derribó la mano de un comisario de la Policía.
Aquel incidente robó el sueño de los vecinos de un conjunto habitacional, situado en el sector Fajardo, en el cantón Rumiñahui, al suroriente de Quito.
Allí, el deportista, acompañado de otros colegas entre ellos, Jerry León y varios allegados, se habría instalado para beber. Sin embargo, la bulla y el escándalo que generó la reunión, molestó a los moradores del lugar, quienes llamaron a la Policía.
Eran las cuatro de la mañana de ayer, cuando los patrulleros arribaron y se encontraron con la presunta gresca.
Según Marco Domínguez, jefe del Distrito de Policía, a cargo de esa zona, había entre 15 y 20 personas involucradas en el pleito.
“Los vecinos les habrían reclamado por el escándalo, por lo que los sospechosos, entre los que se encontrarían varios jugadores de fútbol profesional, procedieron a amenazarlos con picos de botella y armas blancas”, acotó el subteniente.
El percance dejó cinco uniformados con heridas leves, uno más con politraumatismos y al comisario incapacitado de 9 a 30 días, ya que su examen médico legal reveló una fractura en el quinto metacarpiano de la mano derecha.
Al amanecer, medio centenar de vecinos arribaron hasta la Fiscalía de Sangolquí para asentar la denuncia en contra de las ocho personas que fueron detenidas, entre ellas el Tin Angulo y León. “Había más, pero se saltaron hacia el conjunto de al lado porque las terrazas son contiguas”, detallaron los vecinos enfurecidos.
Ellos coinciden en que la llegada de uno de los deportistas a la residencia solo ha traído problemas. “Es arrendador, ni siquiera es copropietario. Él y sus amigos hacen fiestas que duran desde el sábado hasta el lunes”, precisó Fabián Lizano, presidente del condominio.
Él ha debido enfrentarse a los implicados en algunas ocasiones, pero este incidente “es la gota que derramó el vaso”. Esto, debido a que los sospechosos no solo se batieron en duelo con los agentes, sino también con los vecinos del sitio.
Otros problemas
Aunque este fue el incidente más grave en ese espacio, no es el primero. Hace 15 días, Janeth Meneses fue agredida por los mismos sujetos.
“Ese día también se les reclamó por el escándalo. Ellos reaccionaron mal, no sé quién fue, pero terminé en el piso y me lastimé la espalda... No pude caminar bien por dos días”, puntualizó la mujer.
Para ella, la mayor preocupación es su hijo adolescente, quien ya ha sido supuestamente amedrentado por los deportistas. “Tuve que pedir permiso en su colegio para que lleve un dispositivo de defensa. Tengo miedo que lo agredan cuando yo no esté”, indicó Meneses.
Así como ella, otras mujeres del conjunto, que alberga a 74 familia, están en “pánico”, especialmente por la supuesta relación que tendrían los investigados con el líder del Frente Oliver Sinisterra, Walter Arizala.
En los exteriores de la dependencia judicial los moradores referían que los implicados serían familiares de Guacho, pero esto no ha sido comprobado.
“Nos tenían amenazados que si les seguimos molestando van a poner una bomba en el conjunto”, refirió Meneses.
Pese a que está segura de que eso no es cierto, teme “los alcances de esta gente que ya ha tenido pleitos con todo el mundo”.
Entre los cargos que se les podría imputar a los sospechosos estarían: ataque y resistencia, lesiones, desacato a la autoridad, daño a la propiedad privada, amenazas e injurias.
Los implicados ya tenían una denuncia
El pasado 23 de abril, Mauricio Giraldo, otro vecino del conjunto, interpuso una denuncia por daño al bien ajeno, perpetrado por los mismos detenidos.
En esos días, los investigados supuestamente amenazaron a su esposa e hijos y, luego, le rompieron los vidrios de sus dos automóviles. Para él, es inadmisible que “figuras públicas que representan al deporte nacional actúen de esta manera” y teme que sus amenazas sean cumplidas. Pese a ello decidió recurrir a instancias legales, ya que el daño en los automotores supera los $ 4.000.
Según su abogado, Pedro Marcillo, el incidente se agrava, ya que durante las agresiones había niños presentes.
Adicionalmente, Ángel Rivera, presidente del condominio vecino, se sumó a la denuncia de los moradores.
“Hacían demasiado escándalo y los mandamos sacando. Lastimosamente, fueron a parar al lado. Hasta a mi esposa la insultaron”, dijo.