Amigos y simpatizantes de Fernando Villavicencio que querían darle el último adiós casi tumban la puerta del cementerio donde era velado, en el norte de Quito.

Familiares emitieron un comunicado la mañana del 11 de agosto en donde indicaban que se abrirían las puertas al público para honrar al candidato.

(Lea también: Amenaza se cumplió contra hombre asesinado en el suburbio de Guayaquil )

Sin embargo, esto no sucedió y las decenas de coidearios que esperaban en las afueras empujaron la puerta para ingresar a la fuerza. La policía del lugar dispersó a los relajosos con gas pimienta y reforzaron la entrada.

Más tarde, la carroza que llevaba los restos del presidenciable salió bajo el resguardo de un fuerte contingente policial, que lo custodio hasta el cementerio de Monteolivo, donde lo enterraron.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!