Los chinches son diminutos 'vampiros' que se nutren de sangre humana mientras estos están en su estado más vulnerable: dormidos en sus camas. Sin embargo, en París (Francia), estos han invadido la "ciudad del amor" y atacan en cualquier lugar y hora del día.

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La alarma de este problema inició hace más de un mes, cuando varios usuarios los vieron acechar a sus presas por los asientos del cine, grabaron vídeos y los colgaron a Internet. Tiempo después aparecieron en el metro, el tren y hasta en escuelas.

Estos minúsculos parásitos han generado una "psicosis" entre los habitantes de la capital francesa, tal y como refleja el diario Le Parisien en su portada del 29 de septiembre.

París es una de las ciudades más densas de Europa, y está especialmente preocupada por el alcance de los chinches, a menos de un año de que reciba los Juegos Olímpicos y Paralímpicos en el verano de 2024.

Desbordado por la situación, el Ayuntamiento capitalino ha pedido ayuda al Estado francés para erradicar a esta plaga, mientras que el ministro de Sanidad, Aurélien Rousseau, ha pedido "no ceder al pánico general".

"La limpieza no evita por sí solo una primera infección, pero sí que es cierto que una buena higiene y una detección rápida evitan las grandes infecciones", según el Ministerio de Sanidad de Francia, quien actualizó esta semana una guía sobre cómo actuar en caso de infección de chinches.

Lave y seque en la secadora regularmente las sábanas, frazadas, colchas y cualquier ropa de cama que esté en contacto con el piso. Por otra parte, las chinches y sus huevos pueden esconderse en las cestas para la ropa sucia, así que límpielos cuando lave la ropa.

National Geographic sugiere que la incidencia de estos chinches se debe al turismo a nivel global, combinado con las altas temperaturas en el país europeo.

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