Un nuevo episodio de violencia sacudió a Flor de Bastión, al noroeste de Guayaquil. La tarde del miércoles 21 de mayo, un ataque armado en el bloque 9 dejó un saldo de 11 víctimas: dos de ellas fallecieron y las nueve restantes quedaron heridas. Tras el atentado, las autoridades desplegaron un operativo en la zona, lo que permitió el hallazgo de un presunto centro de acopio de armas y drogas vinculado a una organización delictiva.

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Una de las evidencias halladas en esta intervención despertó las alarmas en la institución pues se trataba de un vehículo que fue hurtado a una persona el 18 de mayo de 2025 en el distrito Pascuales, ubicado en el norte de Guayaquil. Según las declaraciones del coronel, el propietario del vehículo fue asesinado para lograr el robo; sin embargo, ahora el automotor entró a cadena de custodia pues los familiares del fallecido dueño la reclamaron. 

¿Cómo fue el operativo que iniciaron tras el ataque en Flor de Bastión?

"No fue fácil dar con el vehículo, la habían cubierto de tal manera que no se veía ni en el sobrevuelo del helicóptero ni en el dron que usamos para rastrear el sector. Fue posible gracias a las investigaciones de los tres subsistemas de la Policía: el eje preventivo, el investigativo e Inteligencia", mencionó el coronel Víctor Ordóñez, jefe de la zona 8.

La intervención policial en la que participaron estas tres unidades se llevó a cabo horas después del ataque. Según el coronel, los agentes encontraron dos viviendas abandonadas que, de acuerdo con las investigaciones preliminares, habrían sido utilizadas por la facción criminal conocida como Los Tiguerones Fénix.

¿Qué encontraron en los dos inmuebles allanados en Flor de Bastión?

En estos inmuebles se hallaron armas de alto calibre, municiones y sustancias sujetas a fiscalización. El detalle del decomiso incluye:

• Un fusil automático.
• 256 cartuchos de calibre 5.56 mm.
• 23 cartuchos de calibre 9 mm.
• 10 envoltorios de heroína.
• 2 fundas con cocaína.
• Dos motocicletas también con reporte de robo.
• Dos motocicletas retenidas que habrían sido utilizadas durante el atentado.
• Una camioneta plateada que había sido reportada como robada

El coronel Ordóñez también confirmó que los inmuebles intervenidos estaban deshabitados al momento del operativo, pero que evidencias encontradas apuntan a que habrían servido como puntos logísticos para planificar y ejecutar actos delictivos.

Flor de Bastión: Este es el ambiente en el peligroso sector de Guayaquil

Flor de Bastión, zona ubicada en el noroeste de la urbe porteña, ha sido uno de los sectores más golpeados por la violencia criminal en los últimos años. Esta zona forma parte de los territorios disputados por bandas que buscan controlar el tráfico de drogas, extorsiones y otras actividades ilícitas. Según cifras oficiales del Ministerio del Interior, Nueva Prosperina concentra uno de los índices más altos de homicidios en Guayaquil.

Los Tiguerones Fénix, la facción señalada en este caso, es una de las variantes del grupo conocido como Los Tiguerones, cuya actividad se ha vinculado a delitos como tráfico de drogas, sicariato y asociación ilícita. Las autoridades no han confirmado detenciones tras el hallazgo, pero señalaron que se mantienen diligencias para ubicar a los responsables del atentado y a quienes operaban los centros de acopio.

El operativo se ejecutó con la participación de unidades tácticas especializadas, que mantienen presencia activa en el sector tras el ataque. Además, se dispuso el levantamiento de indicios balísticos y pruebas químicas en los inmuebles intervenidos.

La situación en Flor de Bastión continúa bajo vigilancia. Mientras tanto, la comunidad exige respuestas y acciones concretas frente a la creciente inseguridad que vive la ciudad.

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