“Vamos por cada uno de ustedes, así se tapen la cara, sabemos que son tres grupos de motorizados y ustedes van a ser los primeros que van a morir”, dice parte de un panfleto dejado la tarde del domingo en varias Unidades de Policía Comunitaria (UPC) del distrito Nueva Prosperina, jurisdicción que registra el mayor número de muertes violentas del país.

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Ante este amedrentamiento en contra de su personal, el coronel Roberto Santamaría, jefe policial de este distrito situado en el noroeste de Guayaquil, afirmó que las amenazas son por la labor que hace la institución, que ha permitido la detención de delincuentes y la recuperación de motos robadas.

“Sabemos quiénes son los que le han puesto precio a la cabeza de los policías, los tenemos ubicados, estamos esperando para actuar en derecho, atentar contra un policía, es atentar contra toda la población, contra el Estado. Estamos preparados para hacerles frente, no nos vamos a amilanar, ni a titubear. La denuncia fue puesta en la Fiscalía”, afirmó.

En la parte final del panfleto también advierten a los uniformados, que van a pagar los que son y los que no son. “Que comience la fiesta, para el casco no existe el fusil rompe chalecos y huesos. Muerte o muerte. Vamos a darles luz verde”. 

Agentes que laboran en este distrito solicitaron el respaldo de la institucion y del Estado para realizar su labor, ya que en estos sectores las bandas criminales amedrentan a los policías, al momento de realizar su labor.

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