A unas hermanitas de tres años y un año, nueve meses, sus padres le pusieron precio. Una pareja, oriunda del cantón Playas llegó a Guayaquil para entregar a sus dos niñas a una persona con quien se habían contactado por redes sociales. Pedían 6.000 dólares por cada una de las nenas.

El general Víctor Zárate, comandante de la Zona 8 de Policía explicó que el negocio ilícito se iba a dar la tarde del martes 22 de marzo en una urbanización de la vía a costa y que padre tiene 64 y la madre 23. Ellos fueron detenidos y puestos a órdenes de las autoridad.

El mayor Santiago Racines, jefe de la Dinapen Zona 8, indicó que la persona que se contactó con los padres fue quien dio parte a la Policía del delito que estaba ocurriendo. “En la audiencia flagrancia se presentó la captura de los teléfonos en la que está la conversación. Ahora las niñas están bajo la protección del Estado. Las autoridades determinar si son entregadas a un familiar o se quedan en una casa de acogida”, dijo el mayor de la Policía.

El jefe de la Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen) explicó que el caso será manejado como una presunta adopción ilegal, cuyo falta está contemplado en el articulo 107 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) tanto a la persona qye vende como la que compra.

La pena para "la persona que facilite, colabore, realice, traslade, intervenga o se beneficie de la adopción ilegal de personas será sancionada con pena privativa de libertad de diez a trece años. La misma sanción se impondrá a la persona que eludiendo los procedimientos legales para el acogimiento o la adopción y con el fin de establecer una relación análoga a la filiación, induzca, por cualquier medio, al titular de la patria potestad a la entrega de una niña, niño o adolescente a otro", indica el artículo.

El capitán Andrés Rivadeneira, jefe Operativo de la Dinapen reveló que este el primer caso conocido por la Policía en que niños son vendidos por sus padres. "Es lamentable lo que hicieron estas personas. El procedimiento fue tomado por el servicio preventivo. Los padres confesaron que lo hicieron porque no tenían dinero para mantenerlas. Hace dos años tuvimos un caso por adopción ilegal", contó Rivadeneira.