Actualidad
“¡Haré todo para descubrir quién mató a mi hijita!”

Jaime Marín, Cuenca (Azuay)
Con su rostro demacrado de tanto sufrimiento, Joselito era consolado por uno de sus parientes. El hombre estaba parado frente al féretro de su hija, de 13 años, y se le hacía un nudo en la garganta conversar de la pesadilla que vive.
Ese dolor fue mayor cuando la tarde de ayer sus amigos llevaron desde la iglesia San Pedro de El Cebollar, hasta el camposanto patrimonial de Cuenca, los restos de su hija donde quedó sepultada.
La pequeña desapareció el 1 de julio pasado cuando fue al plantel donde se educaba para recibir clases de nivelación, pero no llegó. Diecisiete días más tarde fue hallada sin vida por una familia que paseaba a orillas del río Yanuncay, en Cuenca.
La menor de edad fue encontrada dentro de una funda negra la tarde del domingo pasado.
“La muerte habría ocurrido el mismo día en que desapareció, el 1 de julio, por asfixia por sofocación; presentaba signos de abuso sexual”, expresó ayer el abogado defensor de la familia y quien es primo del padre de la víctima, tras revisar el protocolo de autopsia.