¿Le asusta inocularse por los estragos que puede presentar luego del pinchazo? Según el médico y epidemiólogo Mario Paredes los malestares de la vacuna son de carácter general, aunque el galeno señala que hay que considerar que unos la pasan mejor que otros.

Las vacunas por lo general pueden producir dolor en la zona en la cual se realizó el pinchazo, manifiesta Paredes, asimismo puede causar entumecimiento, enrojecimiento, eso depende de la técnica de vacunación y en otras ocasiones depende del inóculo.

“Usted se está introduciendo una sustancia extraña; el organismo y el sistema inmunológico reacciona de manera adecuada. Esta situación de calor, de rubor, es común e igualmente la elevación de la temperatura es un mecanismo de defensa del cuerpo”, sostiene.

El especialista aconseja aplicar hielo (envuelto en una toalla) de manera local para reducir las molestias, el dolor y la inflamación, no se recomienda más allá acetaminofén o paracetamol dependiendo de la edad del paciente y la persona, que la puede tomar cada 8 o 6 horas y descansar”, señala Paredes.

¿Cuánto tiempo descansar? Uno o dos días recomienda el galeno. Sin embargo, si la persona presenta fiebre u otra sintomatología que en realidad lo inhabilite, el reposo debe prolongarse, eso lo determinaría el médico.

El experto recalca que ninguna vacuna reproduce los signos y síntomas de la COVID-19. “Por inmunizarse nadie se infecta ni reproduce la enfermedad, eso es falso. Hay personas que dicen: “Yo me vacuné y me enfermé”. Eso no es correcto”, precisa.

Si presenta problemas de salud, es necesario que visite previamente a su médico de cabecera, por cualquier eventualidad que se presente. Eso hicieron Alejandro Ceballos y su esposa. “Nos pusimos Astrazeneca. Y como se escuchaba que esta podría generar problemas de coagulación en la sangre, consultamos a mi cardiólogo, quien nos sugirió que por seguridad tomáramos un medicamento, la cardio aspirina, una semana antes”, relata Ceballos.

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