Hasta las 00:00 de hoy, viernes 30 de septiembre del 2022, el presidente de la República, Guillermo Lasso, le dio plazo al comandante de la Policía, Fausto Salinas, para que encontrara al exteniente Germán Cáceres, principal sospechoso de asesinar a la abogada María Belén Bernal.

Sin embargo, parece que no se llegará a cumplir el objetivo. Primero porque falta pocas horas para que se llegue el tiempo límite y segundo porque el primer mandatario dijo durante una reunión en Cuenca que “quedamos que nos den respuestas hasta el fin de semana, el comandante de la Policía está haciendo un trabajo dedicado en el Ecuador y en el exterior”

Con esta decisión, la cabeza del comandante Salinas se salvó, por el momento. El nuevo ministro del Interior, Juan Zapata, también se refirió al respecto y abogará por el oficial. El funcionario explicó que desde su perspectiva y por la estabilidad de la Policía Nacional, Salinas debería continuar en su cargo.

“El señor presidente hizo un pedido y lo hizo antes de que yo llegue de ministro del Interior. Yo tendré que conversar con él el día domingo, pero antes quiero que ustedes sean conscientes de que no es el momento de descabezar el mando institucional”.

Ante esta situación, Carlos Alulema, general en servicio pasivo y exdirector de la Dinased, señaló que el primer mandatario está tomando decisiones equivocadas y que no es asesorado de la mejor manera en temas de seguridad.

El exoficial enfatizó que no se puede condicionar con el factor de tiempo a la Policía porque con eso no se realiza una investigación técnica y profesional.

Alulema añadió que si por ejemplo, con el plazo anunciado se lograra detener al teniente Cáceres, esto provocara indignación en las personas que buscan justicia en otros casos. “Todas las víctimas e involucrados en este tipo de hechos exigirán que se detenga al autor del crimen en un tiempo determinado”.

El general presume que las autoridades quizás tienen un indicio fuerte del paradero del fugitivo y que por eso dan esos plazos. Sin embargo, según Alulema “así no se deben manejar las cosas”.