Actualidad
¡’Hospedó’ a un muerto!
El dueño de una casa llegó para venderla y se encontró con la ‘sorpresita’ de que había una osamenta.
En un sector de Chone, en Manabí, la gente ya no podía con un misterioso mal olor
El mal olor que se percibía desde hace dos meses en las inmediaciones de la avenida Eloy Alfaro y Los Naranjos tenía agobiados a los vecinos. No tenía ni idea de dónde provenía con exactitud. Lo único cierto es que olía a muerto.
Sin embargo, la vecina Carmen Zambrano presumía de que era cerca de su vivienda, aunque no atinaba a descifrar dónde se originaba ese ‘aroma de los mil demonios’.
“Apestaba por este sector. Creíamos que era algún animal muerto. Pero después el hedor desapareció y nos olvidamos de aquello”, dijo la mujer, quien aún no sale de su asombro.
Otros moradores de la zona también habían alertado sobre esta situación a las autoridades, que tampoco lograban dar con el meollo del asunto.
Pero fue el fin de semana último que la incógnita se despejó: hallaron en una vivienda de ese sitio de un hombre de 68 años un esqueleto humano.
El ciudadano había viajado de Guayaquil a Chone para ver su inmueble y, acaso, alquilarlo.
Hace un año y seis meses que no visita su vivienda.
Al llegar se encontró con un ‘huésped inesperado’.
“Regreso a los tiempos porque estamos en planes de venderla. Se nos hizo raro porque vimos las seguridades forzadas y una parte del techo superior roto, al ingresar me encontré con algo terrible”, contó el ciudadano a la Policía Nacional.
El afectado daba los primeros pasos dentro de la céntrica vivienda cuando observó un cadáver, prácticamente hecho un esqueleto.
Tras este hallazgo, el manabita alertó a las autoridades para que tomen procedimiento del caso y se investigue. Fue así que personal de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desaparición y Secuestros (Dinased-Chone) acudió a la macabra escena.
Los agentes investigadores ingresaron al domicilio y verificaron que efectivamente existía una osamenta que se encontraba en posición de cúbito dorsal y que pertenecía a una persona de sexo masculino.
La edad oscilaría entre los 25 y 30 años. Asimismo llevaba puesto una camiseta blanca y pantalón de color azul.