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¡Huyen de la pestilencia!

Playas (Guayas)
“Si no nos mató el terremoto, nos matará las epidemias, por eso vine desde Manta con mis hijas Joselin, de 6 años y Ashly, de 5, a Playas para buscar refugio”, comentó Richard Arias Cruz, de 29 años, quien llegó con un ‘equipaje de dolor’.
El hombre, quien es viudo, manifestó que vivía en el barrio La Pradera, de Manta, y hasta allá percibía el hedor de la descomposición y para precautelar la salud de sus hijas y de su madre emigró a Playas, donde la noche del viernes fue recibido por la abuela de las niñas, Isabel Chóez.
Ramona Sabando, de 70 años, también llegó a General Villamil, a casa de su hija Irene Moreira.
Ella, Richard Cruz y otros manabitas dijeron que procuran alejar a niños y ancianos de la insalubridad. (NM)