La tarde del sábado 27 de junio, la Policía Nacional del Ecuador, a través de la Dirección Nacional de Antinarcóticos y la Unidad de Investigaciones Antinarcóticos (UIAN), se decomisó 1,1 toneladas de cocaína. Y tres personas que pertenecerían a una organización dedicada al tráfico ilícito de sustancias fueron detenidas en Guayllabamba, entrada norte de Quito.

Geovanni Ponce, director de la Unidad de Antinarcóticos, informó que  la droga estaba en un doble fondo de un camión. "Se encontraron 22 sacos de yute con paquetes tipo ladrillo", dijo.

En total se hallaron 1.114 de estos paquetes con una sustancia que luego de las pruebas se confirmó que era cocaína.

Este operativo fue posible tras el intercambio de información con la Policía de Colombia, ya que la mercancía venía desde el país vecino, según Ponce.  Esto permitió además identificar a los integrantes de la organización, quienes pretendían durante el estado de excepción  transportar los paquetes en un espacio ubicado entre la cabina y el cajón de madera, que visto desde la parte externa posterior, aparentaba estar vacío.

 El conductor del camión iba escoltado por una Jeep Chevrolet de color azul, conducido por dos hermanos. "Iban adelante para verificar si se hacían operativos de control policial", explicó Santiago Chávez, jefe operativo de la UIAN.

Las tres personas involucradas fueron aprehendidas por la Policía por el presunto delito de tráfico ilícito de sustancias catalogadas sujetas a fiscalización a gran escala.