En la mañana de este 18 de marzo de 2024, el líder norcoreano, Kim Jong-un, lanzó una advertencia contundente al proclamar que "el reloj está corriendo. Estamos al borde de la Tercera Guerra Mundial", mientras supervisaba el desfile militar en preparación para el combate.

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Este mensaje ha sido interpretado como una señal de que Corea del Norte podría unirse a Rusia, siguiendo los pasos de China, países que han enviado mensajes similares en las últimas semanas, elevando el rumor global de vientos de guerra. 

El pasado sábado, Jong-un dirigió ejercicios militares en compañía de su hija, enfatizando la importancia de que todo el personal militar se prepare sólidamente para enfrentar al enemigo y tenga una visión clara del combate para alterar el curso de la historia si estalla una guerra.

Por otro lado, el gobierno surcoreano especula que Jong-un podría haber elegido a su hija como su sucesora, especialmente después de que los medios de comunicación la describieran como una "gran guía", un título reservado a los líderes más destacados de Corea del Norte y a sus herederos.

Estos ejercicios militares podrían ser una respuesta a las maniobras anuales llevadas a cabo por Corea del Sur y Estados Unidos, las cuales concluyeron el jueves 14 de marzo de 2024 tras once días de actividad. Estas maniobras tenían como objetivo fortalecer las capacidades militares y la disuasión ante la amenaza norcoreana.

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