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Le dieron duro por manilarga, en el sur de Quito
El sujeto intentó robar en algunos locales. Sin embargo, en el último negocio le salieron ‘más vivos’ y lo persiguieron hasta darle una lección.
Un grupo de vecinas conversaba ayer sobre la inseguridad en Barrionuevo, sur de Quito, a propósito del video que se hizo viral en redes sociales, el sábado por la noche, en el que se ve cómo linchan a un supuesto delincuente.
Las mujeres estaban en la calle Miguel Chopeya, justo en el lugar donde le dieron duro al sospechoso. Todavía se veían las manchas de sangre que dejó el ‘ajusticiado’.
Ana Tipán comentó que los habitantes están hartos de la delincuencia y que por eso toman represalias en contra de ellos. “Si no venía la policía, lo mataban al ladrón”.
La inseguridad ha empujado a los capitalinos a reaccionar con sus manos cuando sienten peligro. Y eso ocurrió en Barrionuevo. Moradores murmuraban que el supuesto choro ya era conocido en la zona.
La dueña de un negocio de variedades, quien prefirió no identificarse por miedo a represalias, contó que por varias ocasiones vio al joven abrir las puertas de los camiones para sacarse las cosas. Dijo que no ha llamado a la Policía, “porque luego los problemas se quedan con una”.
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Hay dos teorías
La mujer añadió que el sujeto, antes de ser linchado, pretendió cometer algunos delitos por el barrio y andaba con una chica.
Primero habría ido a una tienda de víveres a armar relajo. Ahí, el sujeto, al parecer, quiso llevarse una botella ‘sin permiso’ y el dueño salió a repelerlo. Ante esto, el pillo habría sacado un cuchillo y rompió un saco de arroz.
Luego, el tipo fue a una cevichería y, según los moradores, quiso robarse el casco de una moto que estaba parqueada afuera. Esto habría provocado la furia de los trabajadores, quienes salieron a golpear al hombre y se formó una riña.
Tipán dijo que el pillo habría lastimado con el cuchillo a uno de los encargados y salió corriendo. Los afectados lo siguieron y pidieron ayuda a los vecinos.
Lo corretearon por dos cuadras. El fugitivo supuestamente los amenazaba con una piedra y el arma a quienes lo perseguían, hasta que se cayó. Ese momento fue aprovechado por el populacho, que lo acorraló y le cayó a golpes. “Le daban con correas, con palos y patadas”, recordó un testigo.
Sin embargo, el coronel Marcelo Castillo, comandante del Distrito Eloy Alfaro, comentó que no se trataría de un delincuente, sino de una persona en situación de calle.
Esta, según el oficial, habría pedido comida a los trabajadores de la cevichería, quienes lo habrían “maltratado verbalmente” y luego hubo el linchamiento. Castillo comentó que los afectados no pusieron denuncia ni dieron declaraciones. Al sujeto lo llevaron hasta el hospital Enrique Garcés y fue dado de alta a las 02:00 de ayer.
