Martha Padilla entró afanosa por la puerta de emergencias del Hospital Gustavo Domínguez. Llevaba la medicina que le solicitaron para su hijo Sergio Barreiro, de 24 años, quien se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), herido de bala.

Al otro día, por la mañana, en la morgue notaron movimientos en la funda para cadáveres en la cual metieron el cuerpo. Entonces verificaron que Barreiro tenía signos vitales y lo trasladaron a la mencionada casa de salud.

Diario EXTRA conoció de manera extraoficial que el joven está estable.

Que él se encuentre con vida es considerado un milagro, no solo por su familia sino por todos los que conocen su caso, ya que antes de recibir atención médica permaneció aproximadamente seis horas en la morgue de Santo Domingo, tras recibir al menos dos disparos en la cabeza.

CASO RARO

Carlos Sánchez, especialista en terapia intensiva, manifestó que lo ocurrido con Barreiro, es decir ser declarado muerto y luego presentar signos vitales, es “posible”. “No es común, es una rareza, pero existe”.

El experto dijo que es importante diferenciar entre reflejos de Lázaro, que son movimientos por últimas descargas de energía en una persona ya fallecida, y el retorno de las funciones vitales.

En el caso de Sergio, quien fue herido de bala en la cabeza, pudo ser que su cerebro se “reseteó”. El médico agregó que esta parte del cuerpo tiene plasticidad, capacidad de adaptarse a cambios según la necesidad, es decir generar nuevas conexiones para transmisiones alternas. “Es extremadamente raro, pero puede suceder”.

Como ejemplo mencionó casos de maratonistas que han sido declarados fallecidos y después, en pleno velorio, han salido del ataúd.

También comentó sobre la presencia de toxinas que pueden producir este efecto de ‘muerte lámpara’, como la del pez globo, que lleva al paciente a un metabolismo tan bajo que el corazón late cada 3 y hasta 8 minutos, hasta que se le suministre el antídoto.

Por lo ocurrido, los parientes de Barreiro se muestran recelosos, pero están pendientes y ansían que él sane. “No tenemos conocimiento de qué pasó, qué ocurrió. Ahora lo importante es que se recupere mi sobrino, nada más. El resto, que se encargue Dios”, manifestó una tía materna del joven afectado.

Mujer y cuñada fueron detenidas

Por el atentado contra Barreiro, que ahora es llevado como tentativa de asesinato, se investiga a la conviviente de la víctima y a una hermana, quienes fueron detenidas y la Fiscalía les formuló cargos.

La jueza que conoció la causa les dictó 30 días de prisión preventiva, que cumplen en el penal de Santo Domingo. La Comandancia de Santo Domingo no ha querido emitir una versión oficial al respecto.

Sergio y su pareja, con quien tiene un hijito de 4 años, tenían problemas en su relación, se habían separado y hace poco habían retomado su ‘amor’, según el padrastro del joven.

Barreiro vendía pescado en Puerto Quito, pero hace unos tres meses se había ido a La Concordia con su mujer.