¿Cómo se monitorean las amenazas de inundaciones y oleajes?

En nuestro país no estamos exentos de eventos naturales que en años anteriores ya han puesto en riesgo la vida de la población por la peligrosidad que representan.

Sismos, erupciones volcánicas, deslizamientos, inundaciones, incendios forestales, son algunos de los sucesos climáticos y naturales que han ocurrido en el país y que han dejado saldos negativos para sociedad.

A propósito de la reciente inundación de la cabecera cantonal de Samborondón, producto del aguaje máximo iniciado el 19 de febrero en las costas del país, el Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar), advirtió que “si bien no se esperan comportamientos irregulares del oleaje, este aumento podría, en algunos casos, inundar zonas que se encuentren próximas a la línea de playa”.

En su comunicado agregó que “además podría generar mayores corrientes de resaca y socavamiento de la arena, así como de probables desbordamientos, transporte de sedimentos y fuertes corrientes”.

Estas condiciones se prolongarías hasta el próximo 23 de febrero en las costas continentales y el archipiélago de Galápagos.

Si bien estos eventos suelen ser pronosticados por medio de previsiones de los organismo entendidos con el clima, en ocasiones suelen superar las expectativas y magnitud de su efecto. Pero ¿cómo se sacan los pronósticos y se monitorean estos eventos, como las inundaciones y oleajes?

Vigilando las amenazas

El monitoreo de la amenaza por inundaciones a causa de lluvias extremas, se realiza con base al pronóstico de precipitaciones del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), el cual se clasifica por niveles de acuerdo a los valores estimados.

Mediante un mapa disponible en el sitio web de la SNGR, se visualizan las zonas con mayor probabilidad de amenaza por inundaciones.

A estas zonas se le interseca (cruza) la división político-administrativa del Ecuador para identificar los cantones que podrían verse afectados de cumplirse con el pronóstico.

En el caso de los oleajes, el Inocar emite dos veces por semana la actualización de boletín de este fenómeno que contiene los pronósticos de olas y los valores del Índice de Amenaza por Oleaje (IOA); mediante estos datos la SNGR determina el color de bandera a izar en las playas, y el nivel de amenaza que representa.

Estos datos asimismo son detallados y difundidos a través de un boletín y mapa, entre Gestión de Riesgos, el Inocar y los Gobiernos Autónomos Descentralizados Cantonales, para informar a la ciudadanía sobre los diferentes niveles de amenaza por oleajes en las playas del Ecuador.

Otras amenazas que también son monitoreadas por Gestión de Riesgos son la de caída de ceniza, incendios forestales, movimientos en masa (deslizamientos).

Alerta amarilla vigente en la costa

Actualmente existe una alerta amarilla por el fenómeno de El Niño vigente en todo el perfil costero del Ecuador. Esto incluye a las provincias de Guayas, Santa Elena, El Oro, Manabí, Esmeraldas, Los Ríos, Galápagos y se agrega también a Santo Domingo de los Tsáchilas.

Alexandra Ocles, secretaria de Gestión de Riesgos, indicó en una entrevista radial este jueves 21 de febrero de 2019 que hasta la fecha, existen 4.660 personas afectadas, 31 heridos y 14 fallecidos por la estación lluviosa.

La funcionaria explicó que “al momento hay unas 200 a 250 familias y viviendas afectadas, se han activado los COE para que se puedan dar respuesta a todos los afectados debido a la alta afluencia de lluvias”.

Entre los cantones más vulnerables a inundaciones están:

Además de esta alerta activa en la costa existen otras declaratorias vigentes por eventos peligrosos activos: