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Mercado de Chimbacalle estrena patio de comidas
El espacio estuvo cerrado por más de dos meses. Las caseritas estaban distribuidas en otros espacios.
El mercado de Chimbacalle había perdido su gloria de antaño y las caseritas estaban sumidas en la desesperanza. Muy pocas continuaban en sus puestos, ofreciendo verduras, frutas y carnes, pero siempre con el temor de extinguirse. Sin embargo, desde esta semana ese centro de abastos del sur de Quito regresa al ruedo.
Durante más de 2 meses, las caseritas a cargo del patio de comidas fueron reubicadas a otros puntos de la estructura para iniciar los trabajos de remodelación, indispensables para devolver la vida a esa zona, que servirá como atracción para los moradores del sector.
Las tareas de limpieza, pintura y colocación de mesas y sillas se realizó con la autogestión de los vendedores. Adicionalmente, el Municipio de Quito también contribuyó con las acciones, por ejemplo, la fumigación.
El patio de comida tiene disponibilidad para unas 50 personas. En el área existen varios platillos típicos como llapingachos, papas con cuero, librillo, encebollado, entre otras dlicias de la Costa y la Sierra, según los comerciantes a precios cómodos.
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