El estado de excepción decretado por el presidente de la República, Daniel Noboa, frente a la ola de ataques terroristas en el país, intensificó los controles de seguridad dentro del Metro de Quito.

Una de las disposiciones para la Policía Nacional es identificar a las personas que estén alcoholizadas y no dejarlas ingresar para evitar cualquier incidente dentro de las instalaciones o las 15 unidades.

La noche del viernes 12 de enero, los uniformados no permitieron el ingreso a 10 personas que tenían aliento a licor. Por ejemplo, en la parada de la Alameda, centro de la ciudad, tres universitarios no pudieron entrar porque se tambaleaban.

Dos policías les impidieron el paso. Los jóvenes rogaron para que los dejaran entrar, “es la única forma para llegar a nuestras casas”, imploraban.

En la parada de San Francisco, personal del Metro y policías detuvieron a un tren por varios minutos para ‘cazar’ a los ‘chumaditos’. A dos jóvenes les hicieron salir. Uno de ellos tenía una botella de ‘guanchaca’.

El horario de operaciones durante el estado de emergencia será desde las 05:30 hasta las 22:00.

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