SUSCRIBIRME POR $1/ 1 MES

Exclusivo
Actualidad

Miércoles de ceniza: la celebración católica que sigue vigente

La asistencia en las iglesias en Quito es moderada, pero se registra más en el Centro Histórico ¿Qué significa la cruz de ceniza?

Miércoles de ceniza en Quito
Los fieles católicos se acercaron a las iglesias del Centro Histórico para recibir la cruz de ceniza en la frente.ANGELO CHAMBA

El inicio de la cuaresma en el calendario católico se marca por el miércoles de ceniza y en Quito la tradición no se pierde. Los feligreses se han dado cita desde muy temprano para asistir a la misa y posterior colocación de la cruz de ceniza en la frente.

TE PUEDE INTERESAR: Carnaval: Ecuatorianos hicieron relajo en parque de New York

En iglesias como la de San Francisco, en el Centro Histórico de Quito, se realizan filas para que los sacerdotes atiendan a los fieles. Esto se realizará durante todo el día, por lo que se espera más afluencia de feligreses en los templos.

El arzobispo de Quito, Alfredo Espinoza Mateus, compartió un mensaje sobre esta ritualidad: “Sin dejar de lado la oración, la limosna y el ayuno, como caminos concretos que nos propone la Iglesia en este tiempo fuerte de conversión y de cambio, les propongo vivir este año una Cuaresma de Fraternidad y ello, en este camino de preparación al Congreso Eucarístico Internacional que celebraremos el próximo mes de septiembre”.

  • ¿Qué significa el miércoles de ceniza?

La cruz de ceniza representa la mortalidad. La aplica un sacerdote durante la misa matutina, a menudo junto con una pequeña frase: "Polvo eres y en polvo te convertirás". Muchos optan por dejársela puesta todo el día.

Esta es una ceremonia con la que se inicia el período de 40 días de penitencia, ayuno y reflexión, que según la ritualidad católica, precede a la Pascua o domingo de Resurrección.

La comerciante Lilian Ashqui junto a sus puestos de Carnaval y San Valentín.

San Valentín y Carnaval: El choque de dos festividades que afecta los comerciantes

Leer más

Los orígenes de la Cuaresma se remontan al año 325, cuando se utilizaba más comúnmente como fase de preparación para los bautizos. Los 40 días son un homenaje al tiempo de ayuno de Jesucristo cuando recorrió el desierto después de ser bautizado y antes de comenzar sus prédicas.

¿Quieres leer más contenido de calidad? Suscríbete a Diario EXTRA