El día empezó triste al recordar un año de la muerte de su padre, pero con el paso de las horas se convirtió en terrorífico.

La llamada de un vecino hizo que la jefa política del cantón Machala, Mirtha Aristeguieta, salga para recoger un adorno floral que estaba afuera de su casa. Pero al revisar el ramo de rosas encontró una nota con dos balas calibre 38, como aviso de lo que podría pasarle si sigue al frente de los operativos de control.

Aristeguieta dijo a EXTRA que el martes 18 de enero, mientras estaba participando de una sesión telemática del COE cantonal, donde se analizaba la situación epidemiológica de la capital de El Oro, la llamaron para avisarle que había un ramo en la puerta.

Creyendo que se trataba de algún detalle por el año de la muerte de su padre, salió a recogerlo; sin embargo, al buscar entre la encomienda para saber del remitente lo que descubrió fue una nota que decía: “Señora Mirtha jefa política. Primer y último aviso, y si quiere a su familia deje los bares y sitios nocturnos TRANQUILOS. Recuerde que tiene hermanos, primos y mamá. En El Oro-Machala no la queremos (sic)”.

Pero eso no era todo, pues a más de la advertencia los amedrentadores escribieron que su “cabeza tiene precio”.

Pero en la tarde del martes esa no fue el única amenaza. En la casa del intendente general de Policía de El Oro, Romel Aguilar, también se recibió una ‘ofrenda’.

“Estaba apoyando a Mirtha cuando mi mamá me llamó a preguntar si era mi cumpleaños porque alguien me dejó un ramo, por lo que rápidamente le dije que no lo toque”, contó el funcionario. La diferencia en este caso es que no existían balas ni amenazas. La policía realiza las investigaciones en torno a los dos hechos. (DAD)