Pasó seis días muerto en su cama

  Redacción Quito El cadáver de Armando Erazo fue hallado sobre su cama y en avanzado estado de descomposición tras haber permanecido allí durante seis días.  El hombre, de 30 años, aproximadamente, fue visto por última vez el sábado 14 de mayo. Al parecer, estaba conversando y supuestamente ingiriendo licor con unos amigos, según detallaron varios vecinos del barrio La Pulida, al noroccidente de Quito.  Ya no supieron más de él hasta la tarde del pasado viernes. Ese día, de repente, aparecieron una ambulancia de Medicina Legal y varias unidades de la Policía Nacional en el inmueble donde residía el joven.  En ese momento, Rosa Duchi, habitante del sector, quien caminaba hacia una de las tiendas de la zona, se enteró de que dentro del departamento habían encontrado a su vecino muerto. “Era un chico bastante reservado. Poco se llevaba con la vecindad”, comentó la ciudadana. El olor putrefacto que salía por las rendijas de la vivienda había alertado a otra moradora, quien descubrió el cadáver a través de la ventana. Miembros de Criminalística y Dinased llegaron al lugar y, en la inspección, observaron que cerca del fallecido había algunas botellas de bebidas alcohólicas y varias medicinas.  Los medicamentos y los envases fueron recogidos por los investigadores para los análisis, mientras que el cuerpo fue llevado a la morgue. (HA)  

Redacción Quito

El cadáver de Armando Erazo fue hallado sobre su cama y en avanzado estado de descomposición tras haber permanecido allí durante seis días. 

El hombre, de 30 años, aproximadamente, fue visto por última vez el sábado 14 de mayo. Al parecer, estaba conversando y supuestamente ingiriendo licor con unos amigos, según detallaron varios vecinos del barrio La Pulida, al noroccidente de Quito. 

Ya no supieron más de él hasta la tarde del pasado viernes. Ese día, de repente, aparecieron una ambulancia de Medicina Legal y varias unidades de la Policía Nacional en el inmueble donde residía el joven.