El feriado por la Fundación de Guayaquil es la oportunidad para que familias y amigos visiten calles y zonas habilitadas tras la activación del semáforo amarillo de la pandemia.

Desde el jueves 23 de julio los porteños pueden admirar el arte en ‘Raíces de Luz Eterna’, un conjunto de obras de pintura, cerámica, escritura, luminotecnia e instalación, cuya autoría es del artista Fabricio Valverde, y que se encuentra en la calle Rumichaca, desde Luque hasta la 9 de Octubre.

Otro atractivo es el empuje que se quiere dar a la 9 de Octubre como una arteria donde los peatones vayan ganando más espacio. Así, algunos restaurantes y cafeterías de la ciudad colocaron mesas y sillas en las veredas para la atención al público.

Mientras en barrios del suburbio efectuaron mingas de limpieza y fumigación en las áreas que se desarrollarán los juegos tradicionales y torneos relámpago de indor.

Raúl Campoverde, dirigente que conforma el cuadrante desde la 29 hasta el estero Salado y desde Portete hasta la S, señaló que se efectuarán solo cinco eventos, con la finalidad de evitar casos de coronavirus.

Los festejos a la urbe iniciaron ayer, a las 08:00, al pie del monumento a Simón Bolívar, ubicado en el parque Seminario, donde autoridades municipales y educativas rememoraron el natalicio del Libertador con la colocación de una ofrenda floral.

Eran las 09:00, cuando Johnny Torbay y Gabriela Ortiz salieron en bicicleta desde el Guasmo, sur de la ciudad, con dirección al centro.

La pareja hizo un alto en las calles Panamá e Imbabura para observar el Museo del Cacao y el teatrino. La visita se complementó con la observación del mural El esplendor del cacao.

Esas obras, inauguradas el jueves último, son parte de la estrategia municipal para la promoción de la cultura y arte de la Perla del Pacífico.

Johnny y Gabriela se enteraron, además, que en la calle Panamá, donde antes se colocaban tendales para secar la pepa de oro, se proyecta la peatonalización para fines turísticos.