¡Ahora ladrará en el cielo!

La China era una perrita campeona. Había ganado varios concursos de belleza y de destreza animal. En muchas ciudades de Ecuador destacó y ganó por esas cualidades. Era la reina. Por eso poco a poco se hizo un espacio en la ‘farándula perruna’.

Todo iba bien hasta que el pasado 27 de mayo murió en un vuelo comercial que la llevaba a Quito para que entrenara. Ese hecho se volvió viral y levantó una ola de protestas en las redes sociales.

Por eso sus dueños exigen hoy que le hagan la necropsia. Esto, para conocer las verdaderas causas de su muerte. Los dueños creen que las versiones de la aerolínea deben ser ahondadas. “No es por el valor del animalito, es por el daño que le han causado a mi familia. Por ejemplo, mi esposa se ha deprimido mucho y come poco y mi hijo extraña a la perrita, porque ya empezaban a jugar”, dice César Coronel.

China era de raza American Bully y cuando murió tenía un año y siete meses. Hace 8 meses estaba con la familia Coronel Sánchez que reside en Guayaquil.

La última presentación del animal había sido en Cuenca a mediados de mayo. Allá se llevó los aplausos del público, una medalla y un diploma.

Su viaje a Quito era para que recibiera adiestramiento, porque se le avecinaban otras competencias y su entrenador vive allá.

“Siempre la enviaba vía aérea o terrestre para que fuera entrenada y nunca pasó nada. Esta vez no sabemos lo que ocurrió. Allá llegó muerta”, señala.

“Exigimos que le hagan la autopsia”, añade el hombre. “Ellos no tienen derecho a incinerar el cuerpo de la perrita sin que los dueños conozcamos las razones por las cuales murió” dice.

¿Qué pasó?

César Coronel cuenta que embarcó a las 14:30 a su mascota en el aeropuerto José Joaquín de Olmedo en Guayaquil, porque a las 17:00 debía aterrizar en Quito la nave que la transportaba. Pero el familiar encargado de recibirla en la capital dijo que los empleados de la aerolínea se la estaban entregando muerta y le habían pedido que firmara un documento de entrega-recepción.

“Por la noche me llamaron para una reunión al día siguiente en Guayaquil, donde me dijeron que el cuerpo había sido entregado a Faunaetus, empresa encargada de la fauna en el aeropuerto” añade Coronel. El dueño de China agrega que espera el informe final sobre la muerte de su mascota para luego actuar con su abogada.

Indica que no descansará hasta conocer las causas de su fallecimiento. “Me dijeron que China estaba agitada cuando viajó a Quito, pero mi mascota siempre iba con recomendación del veterinario de cabecera, quien previamente certificaba que estaba bien de salud para poder enviarla”, cuenta el dueño.

Mónica Chonillo, de la Fundación Trato Ético de los Animale, exige la necropsia como único medio para probar la causa de muerte del can y revisión de vídeos de embarque y desembarque en los aeropuertos de Guayaquil y Quito.

Aerolínea dice que el animal estaba agitado

Tame emitió un comunicado el 5 de junio, donde señala que la aerolínea cumple con todos los procedimientos para transportar animales vivos.

Puntualiza que a la hora del embarque en Guayaquil se le advirtió al dueño del agitamiento que mostraba el animal, pero que este había dicho que era un comportamiento normal de China, lo cual quedó registrado como una observación en la guía aérea.

“Tame lamenta profundamente esta situación de caso fortuito y continuará con el compromiso de siempre, no solo con nuestros clientes, sino también con el servicio en bienestar de la preservación de la naturaleza y el respeto a todos los elementos que conforman el ecosistema” concluye el escrito entregado por Tame a la opinión pública.

Las claves

Piden autopsia y vídeos de embarque y desembarque

1) Entidades de defensa de los animales piden el resultado de la autopsia, así como los vídeos de embarque y desembarque de la mascota.

Tame dice que no ha tenido problemas

2) La empresa Tame dice que de enero a mayo del 2019 han transportado 276 animales vivos, sin que se registren inconvenientes.