La Asociación Manos Tejedoras de Sidcay, parroquia rural de Cuenca que agrupa a 25 artesanas tejedoras de paja toquilla, recibió la noche del jueves 1 de diciembre la presea ‘Cuenca Patrimonio Cultural de la Humanidad’. El reconocimiento fue otorgada por el Consejo Cantonal de la ciudad, dentro de los eventos conmemorativos en los 17 años de haber recibido, de parte de la UNESCO, la designación de ‘Patrimonio Cultural de la Humanidad’, en 1999.

Dora Orellana, presidenta de las Asociación, expresó que esta gratitud está dedicada a las cuencanas que no permiten que esta tradición ancestral, que forma parte de la identidad de los morlacos, se muera. La artesana explicó que la labor que realizan “todavía no es valorada como se debe, pese a que, en el 2012, la UNESCO declaró al tejido de paja toquilla Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad”.

Orellana espera que este reconocimiento sirva para poner en la palestra el trabajo de sus compañeras, quienes se han convertido en embajadoras de la cultura cuencana a través de los tejidos de sombreros de paja toquilla que venden dentro y fuera del país. Xavier Barrera, concejal de Cuenca, destacó que la nominaron para el reconocimiento porque la Asociación Manos Tejedoras es la imagen de la permanente lucha de los cuencanos por cuidar y rescatar su identidad.