Unas supuestas voces atormentaban a Jessenia Katherine Tapia Balón y al parecer eso la mantenía sumida en tristeza. Según su madre, Margarita Balón, la joven no quería contar sus problemas.

En el recinto La Industria del cantón Quinsaloma, provincia de Los Ríos, los familiares levantaron una capilla ardiente para darle el último adiós a la madre que deja dos menores en la orfandad.

Entristecidos, los parientes contaron que hace una semana Jessenia habría tomado veneno para maleza.

Sus allegados hicieron todo lo posible para salvarla. La tuvieron internada en una casa de salud de la parroquia El Corazón y luego fue llevada a Latacunga, provincia de Cotopaxi, pero la víctima no resistió el envenenamiento y falleció el viernes 23 de abril de 2021.

La madre comentó que desde hace algún tiempo Katherine aseguraba que “escuchaba unas voces” y empezó a tener alucinaciones. Creían que le habían hecho brujería.

Familiares consideran que los conflictos maritales que la joven habría tenido con su pareja, de quien se había separado en dos ocasiones, la hicieron caer en estados depresivos y eso habría motivado a que ella se tomara el herbicida.