El hallazgo de un cuerpo desmembrado y embalado en dos bultos ha encendido las alarmas en Quito. Un hecho como este no se había registrado, según fuentes policiales consultadas bajo reserva, y esperan que no vuelva a suceder.

Sin embargo, es algo que no se puede descartar, sobre todo porque este macabro suceso sería un mensaje dirigido a miembros de una organización criminal y se relacionaría con la pérdida de un cargamento de más de media tonelada de cocaína ocurrido el 11 de octubre de 2023 en el kilómetro 8 de la vía Pifo-Papallacta, en la misma zona donde se encontró el cadáver la mañana del 19 de octubre.

El coordinador del Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado (OECO), Renato Rivera, reitera que esta muerte es un “mensaje” y que además, luego de un análisis al caso, ha notado la “firma” de un grupo criminal en específico: ‘Los Lobos’.

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El experto detalla que en esa zona ya se han incautado cargamentos de sustancias estupefacientes y armas que tenían vínculos con esa banda. Estos hechos demostrarían el interés que existe de parte de grupos criminales por este sector.

Rivera menciona que Los Lobos tendrían un gran posicionamiento en la capital, pero sus integrantes apuntarían a llevar sus operaciones en las cercanías de Pifo, por varios motivos que contribuirían a mejorar el flujo de su cocaína (ver infografía).

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“Quito per se no es en un centro de almacenamiento. Sí lo pueden ser los valles. Por eso es precisamente ese posicionamiento de Los Lobos (...). Hay un tipo de gobierno que genera estos mensajes de tipo coercitivos, una violencia selectiva, un mensaje para quienes fallan a las organizaciones criminales”, concluye el especialista.

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