María Roldán está preocupada porque teme que los dos delincuentes a los que les metió una golpiza vuelvan a su local, en el norte de Quito, para vengarse.

La tarde del 2 de octubre, la comerciante fue víctima de robo. Dos sujetos la golpearon, le metieron en el baño y se llevaron 165 ‘latas’. Moradores del sector retuvieron a los ladrones y Roldán les dio unos ‘cariñitos’ por haberla asaltado.

Sin embargo, ella no puso la denuncia porque asegura que no podía dejar de vender, por lo que los pillos fueron liberados. La ‘paloterapia’ quedó registrada en un video que se volvió viral en las redes sociales y EXTRA contó la historia de la valerosa mujer.

Luego de esto, la Policía del sector decidió intervenir. La subteniente Erika Chiquito informa que dispuso el patrullaje a pie de cuatro uniformados y que un vehículo de la entidad ronde la zona frecuentemente.

Además, la mañana del jueves 5 de octubre Chiquito acudió al local de Roldán para ayudarle con la activación del botón de pánico y le aconsejó a la comerciante que cuando ocurran eventos de este tipo, ella no se exponga ante los delincuentes.

La oficial añade que lo recomendable no es hacer justicia por su cuenta, “porque en ocasiones se puede pasar la mano y hay problemas. Todo debe hacerse con base en lo legal”.

Apoyo barrial

Roldán se quedó más tranquila con el apoyo de los uniformados del sector, pero enfatiza que no se arrepiente de hacer lo que hizo con los delincuentes que la atacaron. “Me levanto a la madrugada para trabajar y dar de comer a mis hijos. No es justo que malintencionados me quiten en minutos lo ganado”.

La trabajadora de un restaurante ubicado cerca de donde ocurrió la paliza apoya a su vecina. Ella, que prefiere omitir su identidad, dice que si es necesario darles duro a los delincuentes lo hará, “porque debemos estar unidos como ciudadanos ante la inseguridad”.

Un taxista que colaboró en la retención de los presuntos ‘choros’ y que también prefirió no identificarse dice que es mejor no golpearlos, porque “podrían tomar represalias, pero sí podemos agarrarlos para entregarlos a las autoridades”.

Casos similares

La noche del 13 de abril, dos sujetos encapuchados pretendieron robar el local de Henry Jaramillo, en Solanda, sur de Quito. El propietario, al darse cuenta de las intenciones de los sospechosos, sacó un bate de béisbol y los echó de su ‘nego’.

El 2 de junio en Carapungo, norte de la ciudad, los moradores atraparon a un delincuente que previamente le habría robado el ‘celu’ a una joven.

Los habitantes lo ‘cerraron a puñetes’ y luego le prendieron fuego. El delincuente tuvo que ser llevado al hospital por la gravedad de sus heridas.

Mas noticias

Baleado durante un robo: Personal de la Policía del Distrito Eugenio Espejo está desplegado por el sector de El Inca y sus alrededores, en el norte de Quito, tras la pista de delincuentes motorizados.

La tarde del 4 de octubre, un adulto mayor que trató de ayudar a un joven que era asaltado por tres ladrones recibió un disparo en su pecho. Los pillos se movilizaban en tres motos y al parecer ese día asaltaron a cuatro personas que caminaban por la avenida Amazonas. 

Desarticulan banda de brujos: Una banda organizada que se dedicaría al expendio de droga en los sectores ubicados al noroccidente de la capital fue desarticulada por la Policía, tras dos meses de investigaciones.

En total detuvieron a cinco individuos que registran antecedentes penales por robo y porte de armas de fuego. Además, decomisaron un arma de fuego, un artefacto explosivo y varios paquetes de cocaína y marihuana.

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