A través de su cuenta de X, el Ministro de Obras Públicas de Ecuador, Roberto Luque, informó sobre la apertura de una investigación previa en su contra por parte de la Fiscalía General del Estado por procesos contractuales de CELEC durante la emergencia eléctrica que sufrió el país durante el 2024.

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Aunque no precisó qué contratos serán indagados, entes de control como la Contraloría General del Estado, han hecho anuncios y abierto investigaciones a los convenios con Progen y ATM, empresas extranjeras elegidas por el Gobierno para afrontar la emergencia.

"Soy el primero en informarle a la ciudadanía la apertura de una investigación previa por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE) relacionada con los procesos de contratación de CELEC realizados durante la emergencia eléctrica", escribió el funcionario.

Y añadió: "Reconozco y valoro la importancia de contar con el espacio adecuado para ofrecer mi versión de los hechos y contribuir a la total transparencia de la investigación y al esclarecimiento de mi corta gestión".

Finalmente, Luque, uno de los funcionarios más cercanos del Presidente Daniel Noboa, envió un mensaje a la Fiscalía. "Cerrarle la puerta a la corrupción es precisamente abrir puerta de esa transparencia. La FGE puede contar con mi total colaboración durante este proceso".

¿Qué pasó con Progen y la ATM?

Los tres únicos contratos para la compra de generación de energía térmica de emergencia, firmados en medio de la crisis eléctrica que enfrentó Ecuador en 2024, causaron un perjuicio económico al Estado de aproximadamente $140 millones, según lo reconocido el 22 de julio de 2025 por la Contraloría General del Estado (CGE).

Este monto podría aumentar al considerar los efectos colaterales derivados de la fallida incorporación al sistema eléctrico ecuatoriano de los proyectos a cargo de Progen y Austral, según especialistas consultados.

Los exámenes especiales realizados a los contratos con Austral Technical Management y Progen Industries Llc. evidencian deficiencias en estos procesos. El órgano de control identificó que se adquirieron equipos usados, a pesar de que el contrato estipulaba que debían tener cero horas de funcionamiento; algunos motores no son compatibles con el sistema eléctrico ecuatoriano, entre otros hallazgos.

Progen y Austral tenían a cargo la instalación de 241 megavatios (MW) en Ecuador mediante los siguientes proyectos:

• Quevedo III, a cargo de Progen, debía aportar 50 megavatios.
• Salitral, a cargo de Progen, debía aportar 100 megavatios.
• Esmeraldas III, a cargo de Austral, debía aportar 91 megavatios.

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