Este 24 de diciembre, a vísperas de Navidad, la policía dio a conocer la historia de una mujer que fue secuestrada y llevada a la fuerza a una casa de Guamaní, en el sur de Quito.

El hecho se registró el 17 de diciembre, cuando la afectada, de 45 años, salió de su domicilio rumbo a su trabajo. En la tarde, sus familiares se preocuparon porque no regresó.

Al siguiente día, el hijo de la señora recibió un mensaje. Era el secuestrador que le exigía 50.000 dólares para liberar a su madre. Si no lo hacía, él detonaría una granada que la mostraba en una fotografía.

El 20 de diciembre, la familia informó a los agentes de la Unidad Anisecuestros (Unase) sobre el hecho y se organizó un operativo de búsqueda. Sin embargo, no sería hasta después de tres días que las pericias dieron resultados.

Junto a Fiscalía se localizó la casa donde estaba retenida la víctima. Fue así que en la tarde del 23 de diciembre, los policías ingresaron al inmueble.

Advertido, el sospechoso intentó huir. Subió hasta la terraza de la casa y se lanzó. Pero la policía lo inmovilizó luego de la caída y le encontró la granada.

Cuando lo revisaron, lograron identificarlo como Ciro Rosario Rosario, un venezolano de 28 años. Tras la aprehensión, el hombre quedó con prisión preventiva por un lapso de 90 días, ya que se trató de una audiencia de formulación de cargos.

Las autoridades le imputaron dos cargos. El uno fue por secuestro extorsivo y el otro por posesión se armas de fuego.