Donald Trump sorprendió con una declaración en su red Truth Social: aseguró que Coca-Cola aceptó usar “azúcar de caña REAL” en su fórmula en Estados Unidos, en lugar del tradicional jarabe de maíz de alta fructosa. “Este será un muy buen movimiento por su parte —Ya verán. ¡Simplemente es mejor!”, escribió el exmandatario republicano, atribuyéndose la gestión del supuesto cambio.

(Lee además: A Fito no lo torturarán ni maltratarán en Estados Unidos: ¿Qué prometió la justicia?)

La publicación fue acompañada por una imagen compartida desde la cuenta de la Casa Blanca en X, donde se ve a Trump sobre un fondo rojo, con los puños alzados y una botella de Coca-Cola personalizada con su apellido. El mensaje: “Tómate una Coca-Cola con Trump”, una puesta en escena que recuerda al estilo propagandístico que el expresidente suele adoptar.

¿Cambia realmente la fórmula de Coca-Cola en EE. UU.?

Hasta ahora, Coca-Cola no ha confirmado oficialmente que vaya a modificar su receta en territorio estadounidense. En su web corporativa, la empresa aclara que el sabor de su bebida puede variar según el país, ya que en algunos se usa azúcar de caña o remolacha (como en Europa), mientras que en EE.UU. predomina el jarabe de maíz.

Este ingrediente es más barato y ampliamente disponible en Norteamérica, pero ha sido criticado por sectores que lo consideran menos saludable o de sabor inferior. De hecho, muchos consumidores en EE. UU. prefieren la llamada “Mexican Coke”, embotellada con azúcar de caña, considerada más “auténtica” por su perfil más limpio.

¿Es posible un cambio de esta magnitud?

En teoría, sí, pero implicaría grandes ajustes logísticos, económicos y de marketing. El azúcar de caña es más costoso, lo que podría impactar en el precio final del producto. También exigiría modificar contratos de suministro y adaptar plantas embotelladoras.

No sería la primera vez que Coca-Cola hace un movimiento estratégico con sus ingredientes. En algunos mercados ha lanzado versiones con azúcar natural para captar segmentos que buscan productos más “reales” o menos procesados.

Sin embargo, que el anuncio venga de Trump —quien ya no ocupa un cargo público— sin respaldo de la empresa, plantea dudas sobre su veracidad. Hasta ahora, no hay comunicado oficial de Coca-Cola que respalde el supuesto acuerdo.

¿Quieres acceder a todo el contenido de calidad sin límites? ¡Suscríbete aquí!