A Fausto Geovanny Peralta Chávez, de 43 años, la muerte lo sorprendió en su puesto de trabajo. En el mezanine del hotel de su propiedad, ubicado en las calles 6 de Marzo, entre 10 de Agosto y Sucre, fue baleado la noche del miércoles.

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Minutos después, tras una persecución policial, uno de los sospechosos, Antony Wladimir Maldonado Monserrate, de nacionalidad venezolana, fue detenido y puesto a órdenes de las autoridades judiciales. En su poder se encontró el arma de fuego con la que habría cometido el asesinato.

Fuentes policiales indicaron que el extranjero y su compinche llegaron a bordo de una motocicleta, la cual se estacionó frente al sitio de hospedaje. El chamo ingresó al hotel, subió las escaleras, llegó hasta la oficina de Peralta y le propinó cuatro tiros, los cuales acabaron con su vida.

“La víctima estaba acompañada de su conviviente. La señora relató que el asesino, quien cubría su boca con una mascarilla, primero llegó al hotel y preguntó por una habitación. Salió y a los pocos minutos regresó y al ver a la persona a quien buscaba sacó un arma de fuego y disparó”, informó el gendarme.

Moradores indicaron a los investigadores que el venezolano detenido se dedica al expendio de droga en el sector y que posiblemente esta sería la causa que produjo la muerte del dueño del hotel.

Otras de las hipótesis que maneja la Policía es que Peralta Chávez estaba siendo víctima de extorsionadores y que al rehusarse a pagar la ‘vacuna’ lo mataron.

En la escena del suceso, agentes de Criminalística encontraron cinco indicios balísticos calibre 9 milímetros. (AEB)

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