¡Su familia fue a sacarla de los escombros!

Stalin Carrión Martínez, Guayaquil
“Todos somos familia”, repetían parientes y amigos de Janeth Marcelita Balcázar Balcázar, de 42 años, la mañana de ayer, mientras era velada en una asociación del barrio lojano, en Mapasingue Este, en el norte de Guayaquil.  
Ella era comerciante de ropa y habitaba en una modesta vivienda del centro de Pedernales, en Manabí, una de las poblaciones más abatidas por el terremoto suscitado la noche del pasado sábado.
Pero ella no estaba sola al momento de la desgracia. Su esposo Hermel Campoverde y sus hijos, de 10 y 15 años, también se encontraban en casa.
Sergio Campoverde, un familiar, contó que el domicilio no sufrió mayores afectaciones por el sismo, pero sí un edificio adyacente, que cayó sobre la vivienda y provocó que la pareja quedara aplastada.