La tarde del sábado, en las inmediaciones del denominado Canal de la Muerte, ubicado en el sector de Monte Sinaí, al noroeste de Guayaquil, fueron encontrados dos sacos de yute que contenían los cuerpos de dos personas.

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Las víctimas mortales fueron identificadas como Liliana Anay Córdova Bonoso, de 28 años, y Jonathan Israel Gómez Zuñiga, de 19. Ambos mantenían una relación sentimental y habían sido vistos por última vez el 29 de abril.

Según los relatos de sus familiares, la pareja residía en las calles Novena y Capitán Nájera, en el suroeste de Guayaquil. El 29 de abril, la familia fue informada de que Liliana y Jonatan saldrían juntos, pero no sabían con certeza a dónde se dirigían. “Liliana iba a acompañar a Jonatan, quien había decidido mudarse a Monte Sinaí. Después de ese día, no volvieron a tener noticias de ellos”, comentó un familiar cercano.

Fue la Policía, encargada de investigar la desaparición, quien contactó a los familiares para informarles sobre el hallazgo de los cuerpos. Al confirmar su identidad, los familiares identificaron a Liliana por un tatuaje visible en su espalda.

Es estado de descomposición

Los cuerpos fueron encontrados en avanzado estado de descomposición, parcialmente enterrados en el suelo. Estaban envueltos en fundas, metidos en sacos y cubiertos con cal. Además, se constató que no portaban sus pertenencias y se encontraban sin ropa.

Este caso ha conmocionado a la comunidad, ya que, según moradores de la zona, existe una disputa territorial entre bandas delictivas. El canal de aguas residuales, conocido como "Canal de la Muerte", es un lugar utilizado con frecuencia para el abandono de cuerpos, lo que hace pensar que este crimen podría ser parte de un modus operandi recurrente en la región.

La familia de Liliana expresó su profundo dolor, indicando que el estado de los cuerpos sugería que ambos fueron torturados antes de ser asesinados.

Una fuente policial agregó que, tras recibir el reporte, las autoridades se dirigieron al canal de Monte Sinaí para verificar dos bultos sospechosos que aparentemente contenían restos humanos. Al llegar al lugar, confirmaron la presencia de los bultos y coordinaron con unidades especializadas para proceder con el levantamiento de los cuerpos.

En la investigación, se conoció que Jonathan Gómez tenía antecedentes penales. En marzo de este año, fue detenido por tráfico de drogas, y en septiembre de 2024, fue capturado por tenencia de armas.

Una allegada de Liliana relató que ella había decidido acompañar a Jonathan, quien se había mudado a Monte Sinaí. Tras la desaparición, una vecina se comunicó con los familiares y les informó que se habían metido en la casa de Jonatan, donde no solo le robaron, sino que también se lo llevaron a la fuerza.

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