En una casa en construcción en la lotización Las Primaveras, de la parroquia La Unión, del cantón Valencia, Los Ríos, unos trabajadores se percataron que había una gallina muerta en uno de los cuartos.

Al revisar al animal lo vieron ensangrentado y con el ano destrozado. Junto al ave había un preservativo usado que al parecer tenía heces de gallina, por ello presumieron que fue violada.

Moradores asombrados esperaban que las autoridades tomen cartas en el asunto.

Una señora que reconoció como suya al ave, no entendía cómo la sustrajeron del gallinero.

Para la psicóloga Karina Ponce esto habría sido causado por una persona con algún trastorno, problemas de conducta, y que posiblemente estaba bajo efectos de alguna droga. (DV)