Washington, Estados Unidos (EFE)
Donald Trump, aspirante a la Presidencia de Estados Unidos, se vio obligado a posponer un mitin en Chicago luego de que se produjeran episodios de violencia por la presencia de centenares de manifestantes.
Cinco personas fueron detenidas y dos agentes policiales resultaron heridos, uno de ellos al recibir un botellazo en la cabeza, por los altercados entre sus defensores y detractores del magnate.
Las cámaras de televisión de los principales canales estadounidenses mostraron imágenes de enfrentamientos, tanto dentro del Pabellón Chicago de la Universidad de Illinois (donde iba a celebrarse el evento), como fuera del local.
“Tras un encuentro con agentes de la ley, Trump ha determinado que por la seguridad de los cientos de miles de personas reunidas dentro y a las afueras del pabellón, el mitin de hoy se pospondrá a otra fecha. Muchas gracias por su presencia y, por favor, márchense en paz”, indicó en un comunicado la campaña del empresario.
Mientras una gran concentración de gente rodeaba el recinto, dentro de él los manifestantes gritaban “que le den a Trump” y “¡Bernie, Bernie!”, en referencia al aspirante del bando demócrata, Bernie Sanders.
Tras haberse anunciado la cancelación temporal del evento, Trump habló para las principales cadenas de televisión nacionales, donde lamentó que la libertad de expresión, un derecho recogido por la Constitución de EE. UU., fuera “violado” y que el país está tan dividido y furioso que “ya no es posible ni celebrar mítines”.
Las protestas por el encuentro del precandidato presidencial fueron organizadas desde hace días por una coalición de activistas, estudiantes, religiosos y políticos de la ciudad, incluidas numerosas organizaciones latinas y afroamericanas.
La tensión ha ido creciendo durante los últimos días en los mítines de Trump y en uno de ellos, el miércoles pasado, en Carolina del Norte, uno de los asistentes propinó un puñetazo a un manifestante afro después de que este interrumpiera el evento a gritos.