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Diario Extra Ecuador

Buena Vida

¿Arrojar o no papeles al inodoro?

Generalmente cuando entramos al baño, lo primero que observamos es un letrero en la pared que dice: “No lance basura al inodoro y no olvide bajar la válvula ”.

Imagen referencial. La acción de lanzar o no papeles —y de más desechos— por el inodoro aún genera duda.

Imagen referencial. La acción de lanzar o no papeles —y de más desechos— por el inodoro aún genera duda.Pixabay

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Generalmente cuando entramos al baño, lo primero que observamos es un letrero en la pared que dice: “No lance basura al inodoro y no olvide bajar la válvula ”, seguido de una listado de objetos que no deberían ser arrojados al sanitario para evitar taponamiento.

Estos recordatorios no son en vano. Según el Anexo 1 del Acuerdo Ministerial 097A, publicado en el Registro Oficial No. 387 del 04 de noviembre de 2015, “se prohibe descargar en un sistema público de alcantarillado sanitario, combinado o pluvial cualquier sustancia que pudiera bloquear los colectores o sus accesorios, formar vapores o gases tóxicos, explosivos o de mal olor, o que pudiera deteriorar los materiales de construcción en forma significativa”.

El ingeniero ambiental Juan Carlos Erazo explica que las redes de alcantarillado público funcionarían adecuadamente, si solo se descargaran aguas residuales —ya que para eso fueron diseñadas— sin embargo, la realidad es otra.

“Las tuberías son obstruidas por todo tipo de material producto de una mala disposición de desechos. El sistema de alcantarillado colapsa y genera otros problemas como taponamientos, rebose de aguas servidas, malos olores, proliferación de vectores, inundaciones, etc”, expone el experto.

Y es que la presencia de pañales, toallas sanitarias, peinillas, tampones, cabello, piedras, vidrios, arena, fragmentos de cuero, textiles, entre otros, puede generar obstrucciones en los conductos y aumentar la presión interna, lo que provoca fisura, ruptura o taponamientos.

El desgaste y posible oxidación de estructuras del sistema de alcantarillado sanitario acorta el tiempo de vida útil, por lo que el cambio constante de estos genera un gasto considerable a las autoridades de cada ciudad.

Un ejemplo de taponamiento reciente se registró, el pasado 12 de septiembre, en las redes de alcantarillado de Londres. Se encontró un bloque de 250 metros de largo y de 130 toneladas que bloqueó la cañería en Whitechapel, barrio del municipio londinense.

La mezcla del tapón estaba compuesta de grasa, aceite y papel higiénico, a esto se le atribuye el nombre de ‘fatberg’, juego de palabras entre iceberg y fat (grasa).

Los desechos generados en el hogar

Erazo menciona que los desechos sólidos generados en casa deben ser tratados mediante los rellenos sanitarios de las ciudades. Además aconseja que “mientras estén siendo generados en casa, los tachos o recipientes que los contienen deberían permanecer tapados. Depositar en fundas y sacarlos a puntos adecuados dentro de los horarios específicos del servicio de recolección de desechos de cada ciudad”.

En la cañería de desagüe se mezclan los desechos que se eliminan por las tuberías, lo cual según Erazo genera “incrustaciones y masas de grasa solidificada a la cual se adhieren otros tipos de desechos como papeles, trozos de plásticos, toallas higiénicas, etc.”

El lavado de ropa agrega cantidades significativas de fibras, macropartículas de plástico, tensoactivos a las aguas, que al mezclarse o estar en contacto con papel higiénico o con restos de látex, plástico o grasa, generan tapones en las tuberías por donde circulan las aguas residuales.

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